Las elecciones en Francia y Corea despejan al COI el panorama político
Las elecciones presidenciales celebradas este martes en Corea del Sur y el pasado domingo en Francia despejan el panorama político en dos países con importantes intereses olímpicos, un avance que facilitará al COI un contacto estable con nuevos interlocutores.Natalia Arriaga
La ciudad surcoreana de PyeonChang organizará los próximos Juegos de invierno en apenas ocho meses, en febrero de 2018, mientras que la capital francesa, París, sabrá antes, en septiembre, si obtiene la sede de los Juegos de verano de 2024.
Las elecciones estadounidenses del pasado noviembre, en las que Donald Trump accedió a la presidencia (Los Ángeles es la otra candidata a 2024), y los cambios aprobados por el partido gobernante en Japón (Tokio organizará los Juegos de 2020), que favorecen su continuidad, contribuyen a calmar las aguas por las que debe navegar el olimpismo en los próximos años.
Nunca antes en la joven democracia (1987) surcoreana se había destituido a un presidente y adelantado las elecciones. La primera vez ha tenido que coincidir, para pesar del COI, con la recta final de la organización de los Juegos de PyeongChang 2018.
Las instalaciones están hechas y probadas en 25 competiciones test, pero esos ensayos también revelaron errores en el trabajo de los voluntarios y en los servicios para el público.
La próxima visita de la comisión del COI que coordina los Juegos está prevista del 29 al 31 de agosto, fechas en las que el COI confía en que haya quedado atrás la inestabilidad política causada en Corea por el caso 'Rasputina', que llevó al cese de la presidenta Park Geun-hye y al adelanto electoral.
El ganador de las elecciones celebradas este martes ha sido el liberal Moon Jae-in, un exabogado con un amplio currículum en la defensa de los derechos civiles.
En Francia, la candidatura de París a los Juegos de 2024 tardó minutos en felicitar al nuevo presidente de la República, Emmanuel Macron, tras su victoria del domingo sobre Marine Le Pen.
El entorno del proyecto parisino celebró el pasado noviembre como un golpe para su rival, Los Ángeles, la victoria de Donald Trump, por el rechazo que su figura puede causar entre los votantes del COI, y un triunfo de Le Pen hubiera igualado, en ese plano, la competencia.
La Comisión de Evaluación del COI para los Juegos de 2024 llegará el domingo 14 a París, la misma fecha en que Macron tomará posesión del cargo, y uno de los primeros actos en los que podría participar en las jornadas posteriores sería algún tipo de contacto con el grupo de examinadores olímpicos.
El estado francés debe invertir unos 1.500 millones de euros (1.645 millones de dólares) en los Juegos si París obtiene la sede y el COI agradecerá saber cuánto antes quién tomará las decisiones al respecto.
Mientras, desde Los Ángeles, que será examinada por el COI desde este mismo miércoles, han destacado que, desde que fue elegido, Donald Trump no ha sido sino un fiel colaborador de su proyecto olímpico.
El pasado 1 de diciembre Trump mantuvo una larga conversación telefónica con el presidente del COI, el alemán Thomas Bach, para expresarle su "fuerte apoyo" a los planes angelinos.
"Donald Trump ha hecho todo cuanto podríamos haberle pedido para respaldar nuestra candidatura", ha manifestado su máximo responsable, Casey Wasserman. "Desde el punto de vista de lo que necesitamos del gobierno federal, tenemos todo lo que esperábamos".
La candidatura de Los Ángeles está enteramente financiada de manera privada, pero, en caso de victoria, el gobierno sí deberá comprometerse con gastos en distintos capítulos, sobre todo el de seguridad.
La estabilidad política reina también en Japón, desde el punto de vista de los intereses del COI, que concedió a Tokio la sede de los Juegos de 2020.
El pasado marzo el partido gobernante aprobó una reforma interna que permitirá al primer ministro, Shinzo Abe, optar a un tercer mandato al frente de la formación y, con ello, presentarse a la reelección para gobernar el país hasta 2021.
Abe está al frente del ejecutivo nipón desde 2012 y es un político muy apreciado en el COI. Estuvo en Buenos Aires en 2013 para apoyar a Tokio en la elección de la sede olímpica y se ganó el cariño de la familia olímpica durante la ceremonia de clausura de los Juegos de Río 2016, en la que se presentó disfrazado de Mario Bros.
Las próximas elecciones en Japón deberían celebrarse antes de diciembre de 2018, aunque es habitual que se adelanten.
El otro país con sede olímpica ya concedida, China, no causa al COI una particular preocupación. Pekín organizará los Juegos de invierno de 2022.