Un nuevo miembro para el debate de la portería
Andriy Lunin, guardameta ucraniano del Real Madrid que juega cedido en el Leganés, volvió a ser titular con el conjunto blanquiazul tras varias jornadas sin contar con oportunidades y completó una excelente actuación pese a la derrota de su equipo por 0-2 contra el Espanyol en Butarque.
Reserva habitual a la sombra de Iván Cuéllar, la salvación matemática que los blanquiazules certificaron imponiéndose por 0-3 al Sevilla la jornada anterior animó a Mauricio Pellegrino a darle una oportunidad bajo los palos.
Volvía de esta manera a entrar en los planes tras no hacerlo desde el pasado 9 de marzo contra el Atlético de Madrid. Sancionado su compañero por acumulación de amonestaciones, Lunin formó de inicio en el Wanda Metropolitano e incluso detuvo una pena máxima pese a que los suyos acabaron cayendo por 1-0.
El duelo ante el Espanyol se presentaba pues como un buen momento para reivindicarse y demandar una oportunidad a las órdenes de Zinedine Zidane mientras se especula sobre si habrá movimiento el próximo verano en un trío de arqueros que forman Thibaut Courtois, Keylor Navas y Luca Zidane.
A la espera de las decisiones que se tomen en ese sentido en las oficinas del estadio Santiago Bernabéu, la idea del Leganés es solicitar de nuevo un préstamo pese a que su escasez de protagonismo a lo largo de este curso y las posibilidades de que se quede en su club de origen dificultan esta operación.
Hasta la fecha Lunin había disputado cinco encuentros, tres en LaLiga Santander y dos en la Copa del Rey. En ellos encajó tres goles, viéndose afectado en esta última competición por una cláusula en su contrato que le impidió jugar contra la entidad que le adquirió en propiedad el pasado verano durante la eliminatoria de octavos de final.
En el que suponía su retorno al césped se consagró como el mejor de los suyos firmando una actuación sobresaliente mientras, a casi quinientos kilómetros y a la misma hora, los madridistas caían por 3-1 en San Sebastián contra la Real Sociedad en su último choque como visitante de la campaña.
El enfrentamiento entre Leganés y Espanyol arrancó frío por lo que el guardameta apenas tuvo que intervenir hasta que en el minuto 27 le tocó esforzarse para evitar que acabase en el fondo de las mallas un buen intento de Melendo.
A partir de ahí se desató el rival, gracias principalmente a la aportación de Wu Lei. Fue entonces cuando Lunin se convirtió en una pesadilla para el atacante chino pese a que el primer cruce entre ambos le fue adverso toda vez que consiguió sacarle con acierto el mano a mano pero no pudo evitar que Borja Iglesias marcase en el rechace.
De ahí al descanso se vio poco amenazado pero fue en la segunda parte cuando su figura se agrandó en un contexto complicado, pues los suyos estaban con diez por la expulsión de Unai Bustinza y volcados al ataque en busca del empate.
Pese a que la acción acabó siendo anulada posteriormente por fuera de juego, Lunin evitó una diana cantada de Borja Iglesias cuando parecía que esta aún era válida. Acto seguido volvió a encontrarse con Wu Lei salvando a los suyos con una parada providencial.
Finalmente no pudo evitar el segundo de la tarde, transformado por Borja Iglesias desde el punto de penalti. Pero sí dejó al nueve sin el premio del hat trick frenando un intento de vaselina y evitó también un tanto del venezolano Roberto Rosales.
Así cerró la que quizás haya sido su mejor actuación individual desde que aterrizó en tierras españolas como una firme apuesta de futuro del Real Madrid para su portería procedente del Zorya Luhansk de su país natal.
"Creo que ha tenido paradas mano a mano y jugadas peligrosas donde ha tenido atajadas importantes. A nosotros que nos creen tantas situaciones no es normal y me da un poco de bronca resaltar al portero porque eso quiere decir que nos llegaron mucho. Hay un momento en el que teníamos que arriesgar, era todo o nada y el partido estaba roto", declaró posteriormente en rueda de prensa su entrenador Mauricio Pellegrino.
"Creo que va a ser un gran portero en el futuro, muy joven. Para mi este año ha aprendido mucho y va a seguir creciendo, sin lugar a dudas", señaló también el argentino ante los medios a la conclusión del choque.
Preguntado acerca de la posibilidad de seguir contando con él la próxima campaña, no quiso pronunciarse: "Hay muchos cedidos que me gustaría que siguieran y vamos a ver las posibilidades que tenemos. Es un puesto para nosotros complejo de cara a la próxima temporada por muchas razones. Cuéllar termina contrato, Lunin no es nuestro, Prieto tampoco. Es una posición prioritaria".
El Leganés cerrará ahora la temporada visitando al Huesca en un enfrentamiento que podría servir de nuevo como escaparate para el joven de veinte años. Después llegará el verano, unos meses donde se decidirá qué derroteros sigue un destino que parece tenerle reservadas tardes de gloria.
