Pelea por hacer con Ancelotti lo que no pudo hacer con Zidane: mes clave
El final del curso pasado, con Dani Carvajal y Lucas Vázquez lesionados, sentó muy bien a Álvaro Odriozola, que ahora, con Carlo Ancelotti a los mandos, contará con una tercera oportunidad para hacerse con un hueco en el Real Madrid ya sea como titular o como alternativa en el lateral derecho.
Aunque posiblemente podría ser utilizado como moneda de cambio para la llegada de alguna cara nueva, de momento Odriozola se queda en el club blanco para pelear por minutos y convencer a su nuevo entrenador. Si con Zidane apenas tuvo opciones, con Ancelotti podría cambiar su futuro en el Real Madrid.
Por ahora, salvo escasos momentos de alegría, a Odriozola vestir de blanco no le ha sentado demasiado bien. Desde que llegó al Real Madrid en la temporada 2018/19, los datos no acompañan a un defensa de 25 años que aún tiene mucho recorrido.
En total, cuando ha formado parte de la plantilla blanca, incluidos los meses anteriores a su cesión al Bayern en el mercado de invierno del curso 2019/20, disputó 43 de los 135 partidos posibles (31'8 por ciento), 36 de ellos como titular (26'6 por ciento). Además, acumuló 3.268 minutos de 12.150 (26'8 por ciento) y se perdió 26 duelos por lesión.
Esos datos no son muy halagüeños para el lateral diestro del Real Madrid. Sin embargo, a final del curso pasado vio brotes verdes cuando parecía destinado al ostracismo. Aunque Zidane casi siempre prefirió a otros jugadores en su puesto, en el último tramo del curso tuvo que utilizar a Odriozola por la plaga de lesiones que asoló a la defensa del Real Madrid.
Aún así, el técnico francés no tuvo buenos gestos con Odriozola, que cuando emergía gracias a que jugadores como Carvajal y Lucas Vázquez estaban en la enfermería, prefirió colocar a Nacho en el lateral derecho en duelos de máxima importancia como el que disputó frente al Chelsea en las vueltas de las semifinales de la Liga de Campeones.
Incluso en Granada, cuando restaban tres jornadas para el final, y también sin Lucas Vázquez y sin Carvajal y con Nacho obligado a jugar en el centro de la defensa por las ausencias de Varane y Ramos, Valverde le quitó el puesto. Aquel duelo de la jornada 36, Odriozola salió al campo tras el descanso por la lesión del canterano Marvin y en la segunda parte marcó uno de los goles de la victoria (1-4).
Esa es la buena noticia para Odriozola. Que pese a ser casi siempre el último de la lista para jugar, cuando lo hizo, cumplió. Y, de los doce últimos partidos oficiales del Real Madrid el curso pasado, participó en once y fue titular en siete. Dejó dos goles y un sabor dulce en la afición madridista que vio como Odriozola podía ser, como mínimo, un buen recambio.
Con Ancelotti, la historia de Odriozola en el Real Madrid comienza desde cero. Con contrato hasta junio de 2024, tiene la estabilidad necesaria para competir con Carvajal, Nacho y Lucas Vázquez, tres de los jugadores renovados este verano en la plantilla blanca.
Excepto Nacho, que ahora tiene contrato hasta junio de 2023, Lucas y Carvajal firmaron hasta junio de 2024, como Odriozola. De momento, el Real Madrid sólo ha fichado a un defensa, David Alaba, que puede ejercer de central o de lateral izquierdo. Odriozola, por tanto, puede competir de tú a tú, desde el principio, con sus tres rivales. Y, de todos, el único que es lateral derecho puro como él, es Carvajal.
Tiene por delante un duro trabajo para convencer a Ancelotti de que, como mínimo, puede ser el segundo lateral derecho de la plantilla y que no tendrá que recurrir a Nacho o a Lucas Vázquez para ocupar la plaza de Carvajal cuando no pueda jugar.
De momento, eso es lo mínimo a lo que debería aspirar Odriozola en un proyecto nuevo. Ancelotti tiene tiempo para elegir a su lateral derecho titular. Odriozola, si las lesiones le respetan, podría ser una opción. Tiene justo un mes, lo que resta para el inicio de LaLiga, para pelear por no volver a caer en el ostracismo y convertirse en un hombre importante en el Real Madrid.