Llega la hora del Mariscal en su campo fetiche
Las Navidades no fueron tan dulces como antaño en la brasileña Alvares Florence, localidad donde reside la familia de Weligton. El central blanquiazul no tenía demasiado que festejar, llegó a su país para pasar sus vacaciones como suplente del antepenúltimo de Primera. Pero en el horizonte veraniego de Brasil se divisaba Gijón como la panacea. Otra vez Gijón, pensaría Weligton. El defensa malaguista vuelve al once tres jornadas después en el que es, sin duda, su campo fetiche. Allí marcó su único gol como profesional del Málaga (de cabeza la temporada pasada) y
allí cuajó uno de sus mejores partidos con la elástica blanquiazul en la temporada del ascenso a Primera. Fue precisamente aquel duelo matinal retransmitido por Canal + el que le dio galones y prestigio en la categoría de plata.