El “corazón” de Ricca

Fede Ricca ha sido otro de los 'rehabilitados' de Míchel. Condenado al ostracismo tras su lesión y sin mucha confianza de Juande anteriormente, el uruguayo se ha hecho indiscutible por méritos propios con Míchel y ha estado sobre el campo en los mejores momentos del madrileño en el Málaga. Tuvo actuaciones brillantes en los duelos ante el Sporting y el Barça y no ha bajado el nivel desde entonces. Por eso Míchel lo halaga y lo señala como el “corazón de este equipo”. No es poca cosa.

Porque Ricca, en cuyo debe siguen estando las tarjetas, es puro ADN competitivo uruguayo. Es coraje, intensidad y raza sobre todo lo demás. Eso que Míchel llama corazón y que está escrito en los sones del himno del Málaga. “No se rinde nunca, da todo lo que tiene y más”, seguía anoche el técnico en la rueda de prensa pospartido.
El charrúa, de hecho, tuvo que ser suplido por calambres sin más importancia por el esfuerzo de estos días. “Estaba extenuado”, dijo Míchel, que confesó además que está jugando con un hombro dañado. “Nos identificamos porque ese es el corazón que queremos para nuestra equipo”, sentenció el entrenador blanquiazul en una loa bien merecida para Ricca.