Una necesaria excepción en el fútbol español
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El club presenta un ERE
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El desfase salarial, de más de 15 millones
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Pendientes de la Junta General de Accionistas
Como bien señala el dicho popular, no hay más cera que la que arde en el Málaga. Las cuentas son las que son; las necesidades, manidas y magnánimas desde hace tiempo. El club requería de una reestructuración global que entendió el administrador judicial, José María Muñoz, desde que tomara posesión de la entidad. Casi tres meses después de su nombramiento -se cumplen este miércoles-, Muñoz adoptó una decisión consabida en el seno de la entidad y que es una excepción dentro de los movimientos existentes en los últimos meses en el fútbol español tras el estallido de la crisis del COVID-19: presentar un ERE. El Málaga, en esta ocasión, es el primero en adoptar esta medida tras el inicio de la pandemia y, en su caso, el virus no ha hecho sino fortalecer una intención que ya venía de lejos y que ha concretado el administrador.
Porque fueron varios los equipos que se acogieron al ERTE (Expediente de Regulación Temporal de Empleo). Entre ellos, transatlánticos como el Barcelona o el Atlético de Madrid en LaLiga Santander o, en lo que respecta a LaLiga SmartBank, Las Palmas, Zaragoza, Rayo Vallecano o Tenerife. ¿Qué diferencia hay? Que en un ERTE los trabajadores que abandonan su puesto de trabajo lo hacen de forma temporal (aunque también puede darse mediante una reducción de jornada y salario), volviendo a ocupar sus funciones una vez expire. Sin embargo, el ERE afecta de forma más drástica, es una medida mucho más extrema y que se toma, como es el caso del Málaga, cuando la situación es casi inabordable. En el recuerdo, el mismo procedimiento en 2007 con Fernando Sanz como presidente.
Muchos ERTEs pero ningún ERE... hasta este 19 de mayo de 2020. Por sorpresa, y poco antes de las 14:30 horas, el Málaga lanzaba al mundo una noticia que rápidamente se multiplicó por todos los medios locales y nacionales. Los 15,2 millones de desfase salarial que recogió el administrador en uno de sus informes serán rebajados por este ERE, aunque está por discernir el volumen de la decisión. Es una medida más de austeridad dentro de un estricto plan de viabilidad a acometer, necesaria de implementar y que se enmarca dentro de la obligación de "asegurar la permanencia" de un club que en próximas semanas o meses podría dar a conocer más medidas de consideración que abarcarían al plano estrictamente deportivo.