Shaqiri hace justicia ante Serbia sobre la bocina
Suiza estrena su casillero de victorias en el Mundial de Rusia complicando la clasificación de Serbia para octavos, la que apuntaba a ser la primera de su historia como país independiente. Ahora, los balcánicos necesitan ganar a la Canarinha en su último partido para seguir en el Mundial. El equipo brasileño, por su parte, puede quedar fuera si pierde ante los balcánicos.
Desde el principio la declaración de intenciones de ambos equipos quedó en evidencia. Sin tránsito por el centro del campo, balcánicos y helvéticos buscaron el área rival sin descanso.
Mitrovic fue el encargado de golpear primero tras un intento previo sobre la portería de Sommer. De cabeza tras un centro de Tadic desde la banda derecha llegó el primer tanto del encuentro.
El gol en contra desperezó a Suiza que no tardó en buscar la igualada. Se hizo con el balón mientras su rival retrasaba sus líneas y frenaba con dureza las rápidas acciones suizas. Pudo empatar el conjunto de Vladimir Petkovic a la media hora, en un pase filtrado por Steven Zuber a Blermi Dzmaili que detuvo de forma brillante Vladimir Stojkovic.
Reaccionó Petkovic en el intermedio. Dejó en el vestuario a Haris Seferovic y confió en Mario Gavranovic. Y pronto llegó el empate. Pero fue con un zurdazo desde más allá de la frontal de Granit Xhaca, que recogió un rechace para enviar un disparo imposible para Stojkovic.
Suiza se hizo con el partido. De hecho, pudo tomar ventaja a la hora de juego, con otro tiro. Pero la cruceta salvó a Serbia que se había volcado hacia la meta helvética para recuperar la ventaja perdida.
Sin embargo, el atacante del Stoke City se quitaría la espina ya casi al final del encuentro al culminar un gran contragolpe gracias al pase de Gravanovic. Shaqiri salió desde su campo y emprendió una carrera en solitario hacia la meta rival. Salvó a Stojkovic y envió la pelota a la red para dar el triunfo a su equipo y aproximar a Suiza a los octavos de final.
