Suecia lidera en la locura
El sueño hecho realidad. La mariposa que cumplió su camino. Suecia cumplió el imposible y estará en octavos. Los hombres de Andersson, a base de esfuerzo, de creencia, de insistencia y mucho gol, lograron derrotar a México y lograr, en un histórico liderato, acceder a los octavos de final. La Tricolor, tras vencer a Alemania y Corea del Sur, vivió una auténtica pesadilla en la que sólo un tanto angustioso de los asiáticos en el descuento les permite seguir vivos en el Mundial.
Nadie creía en Suecia. Toni Kroos parecía haber apuntillado a sus hombres y sus ilusiones. Nadie pensaba en ellos, todos hablaban de México y, entonces, Andersson y los suyos callaron a todo un planeta. Todos miraron a los alemanes -que cayeron eliminados tras perder de forma ridícula ante Corea- pero nadie olvidará el hito amarillo.
Con miedo, con mucho miedo. Así saltó México -que repetía alineación después de vencer a Corea del Sur- al terreno de juego este miércoles para enfrentarse a Suecia. El empate era suficiente para los hombres de Osorio para acceder a octavos tras las victorias ante Alemania (0-1) y Corea del Sur (1-2). Y se notaba.
En el otro lado del verde, la ilusión y el entusiasmo de Suecia. Los amarillos necesitaban vencer para pasar a la siguiente ronda sin depender del resultado de los alemanes ante Corea del Sur. Y también se notaba.
Salieron mejor los suecos: Fosberg, Berg y Toivonen acumulaban ocasiones, Ochoa tapaba huecos como podía y, mientras, los suyos intentaban liberar sus nervios. El VAR, como de costumbre, intervino, pero esta vez no decretó penalti tras una mano del Chícharo dentro del área.
Al descanso llegaron con todo por decidir, con el miedo verde y con la insistencia amarilla. Al descanso, todo tal y como comenzó.
Un acelerón sin respuesta
Tras el paso por vestuarios, Suecia aceleró y el partido le pasó por encima a México. Poco tardaron en adelantarse los suecos que, gracias a una contra excelente, invitaron a Augustinsson a anotar su primer tanto en un Mundial.
Golpe de efecto en el encuentro. México parecía perdida, inundada por el miedo e intoxicada por el pésimo primer tiempo realizado. Suecia se colocaba primera de grupo y lo veía todo a su favor.
El segundo no tardó en llegar. Héctor Herrera, uno de los mejores durante esta fase de grupos, perdía de forma ridícula el balón en el centro del campo, Suecia salía a la contra y Héctor Moreno derribaba a Berg en el área. Granqvist, que ya había completado un excelente partido en defensa, tumbaba las redes desde los once metros. Las redes, el ánimo y la esperanza de los de Osorio.
Suecia reculaba, México intentaba acercarse, pero lejos de conseguir recortar distancias, la desgracia se ampliaba. Un centro al área sin apenas peligro acabaría en la mano de Álvarez, que anotaría, con la mano, gol en propia puerta.
De ahí al final, la mirada se pasó al encuentro entre Alemania y Corea del Sur. Los asiáticos perdonaban y el banquillo Tricolor perdía los nervios. Pero llegó el momento más esperado, llegó el (los) tantos asiáticos en el final de partido y permitía a los verdes a seguir soñando en Rusia.
Suecia lidera en la locura, Suecia sigue soñando. México, de la mano de Corea, también.
