Odegaard, ajeno a los rumores
El paréntesis navideño ha tenido un nombre propio en el entorno de la Real Sociedad: el de Martin Odegaard. El noruego ha completado una magnífica primera vuelta de campeonato que ha convertido a Martintxo, como ya le conocen en Donostia, en uno de los grandes ídolos de la afición txuri urdin.
En unos días sin actividad deportiva los rumores sobre una posible vuelta del nórdico al Real Madrid el próximo verano han crecido como la espuma. La entidad blanca cedió a Odegaard a la Real por dos años y, si regresara en verano, el club blanco tendría que pagarle una cantidad en concepto de penalización.
Pese a ellos será el propio Odegaard el que tenga la última palabra sobre su futuro, tal y como sucedió esta pasada pretemporada. Y lo cierto es que hasta el momento el futbolista se ha mostrado encantado de su estancia en el club blanquiazul, donde ha dado un importante salto cualiativo en su carrera.
Odegaard se mantiene ajeno a cualquier especulación y su intención, como ha mostrado en todo momento, es seguir ajeno a todo tipo de especulaciones y mantener su progresión a las órdenes del recién renovado Imanol Alguacil.
"Ya he dicho más de una vez que está totalmente centrado. En eso es un chico ejemplar. Solo piensa en la Real y en hacer mejorar al colectivo e individualmente. No tengáis duda de él ni de un jugador. Todos están deseando aportar lo máximo porque quieren aportar viendo como está el equipo y la afición", comentaba este mismo viernes el oriotarra en la previa del primer partido del año, el domingo con el Villarreal.
Los rumores han dejado espacio incluso a las bromas dentro del propio club con la complicidad del jugador. Así, el 28 de diciembre, Día de los Santos Inocentes, comenzó con una noticia que durante unos segundos sobresaltó a la afición txuri urdin.
Según la información que se manejaba, el jugador de la Real Sociedad el noruego se marchaba cedido al Manchester City. Tras las risas provocadas, el futbolista noruego envió un divertido vídeo para la hinchada. "Os lo habéis creído, aupa Real", fue la reacción de Odegaard ante la inocentada.