Los grandes fichajes de la Real Sociedad: "El que está aquí es porque quiere"
En los últimos años, la estrategia de la Real Sociedad de combinar jugadores formados en Zubieta con fichajes de relumbrón está dando réditos. Una estrategia que ha traído consigo una retroalimentación o simbiosis entre canteranos como Robin Le Normand, Ander Barrenetxea o Martín Zubimendi y refuerzos como Alexander Isak, Mikel Merino o David Silva que ha ayudado a ambas partes a crecer y, por encima de todo, a llevar al equipo txuri urdin a nuevas cotas impensables hace unos años. Dos clasificaciones a Europa League, otra a la Champions, la final de Copa de la 2019/2020...
Tal y como ha asegurado Mikel Oyarzabal en Universo Valdano, esta es la estrategia que el club debe seguir llevando a cabo para seguir creciendo. "La situación que había hace 10 años y la de ahora es completamente distinta. Tanto los que somos de aquí como luego el que llega de fuera hacen ver que el que está aquí es porque de verdad quiere estar. No como algo pasajero, sino como algo que lo sienten de verdad", afirma.
El extremo eibarrés se ha deshecho en elogios hacia algunos de los refuerzos que la Real ha hecho en las dos últimas temporadas. Sobre el sueco Alexander Isak asegura que es un jugador que "da mucho al equipo" tanto dentro como fuera del campo. "Igual parece que está callado, pero cuando se adaptó se vio que es una persona alegre y que hace bromas todos los días. Mucha gente se sorprendería".
La adaptación también ha sido fundamental para el rendimiento de Mikel Merino, tras una primera temporada muy irregular. "Estaba cómodo, porque veía que era un sitio en el que la gente le iba a ayudar y a apoyar, pero no terminaban de salirle las cosas y se lesionaba mucho. Después de pasar por eso, cuando consigues lo que realmente quieres, la satisfacción es mayor. Cada experiencia que nos trae la vida es cada vez mejor".
Oyarzabal sobre compartir equipo en la Real con su 'ídolo' Silva
El fichaje de David Silva fue uno de los más sorprendentes del mercado de fichajes. El primer sorprendido, a buen seguro, sería un Mikel Oyarzabal que admitió que es uno de los jugadores en los que más se fijaba cuando era niño.
No obstante, cuando Oyarzabal tenía siete años, el canario estuvo cedido en el Eibar. Pese a que no se acuerde mucho de aquella etapa, sí que rememora lo que le decía su padre: "era un jugador diferente, con un talento que ya se le veía".
Casi dos décadas después, ambos juegan juntos en Anoeta. Sobre Silva, Oyarzabal destaca que es "un jugador que tiene la capacidad de decidir en muy poco tiempo, y casi siempre de manera adecuada". "Habla muy bien de él que haya querido venir aquí para seguir peleando. Pero también habla muy bien del club que haya decidido venir. Hay que dar valor a las dos cosas y ojalá esté muchos años con nosotros porque lo hace muy bien", concluye.
