El Eibar se aferra a la estadística para mantener viva la esperanza de la salvación
La SD Eibar sabe que solo le vale ganar este jueves ante el Real Betis si quiere mantener vivas sus esperanzas de mantenerse una temporada más en la máxima categoría. Para lograrlo los armeros pueden aferrarse a las estadísticas, ya que los verdiblancos sólo han ganado en Ipurua en su primera visita y ha cosechado desde entonces cinco empates y cuatro derrotas.
El 5 de noviembre de 1989, en partido de Segunda División, el Betis visitaba por primera vez en su historia al conjunto armero, al que ganaba por 1-3 merced a los goles de Chano, Puma Rodríguez y Pepe Mel, antes de que Oliden hiciese el tanto guipuzcoano en el tiempo de prolongación.
Las cuatro siguientes visitas verdiblancas a Ipurua, en Segunda, arrojaron un balance de tres empates, todos ellos sin goles, y un triunfo local, el que se dio en la campaña 1992-93, cuando el gol de penalti de Mel fue insuficiente para responder al doblete de Asier Garitano.
El primer duelo, de los celebrados en Guipúzcoa, en Primera entre estos dos conjuntos fue en la temporada 2015-16 y deparó un empate a uno firmado por el goleador bético Rubén Castro y por el ariete local Sergi Enrich.
Rubén Castro y Sergi Enrich también marcaron un año después, en un encuentro que Pedro León y Kike García decantaron (3-1) para un Eibar que también superó al Betis en las dos campañas siguientes: con un 5-0 en la temporada 17-18, cuando anotaron Amat, en propia meta, Escalante, Charles, que hizo un doblete, y Enrich; y por la mínima, con gol de Cote.
La pasada temporada, béticos y armeros empataron a uno un encuentro en el que Fekir adelantó a los andaluces y Orellana, de penalti, igualó para los azulgranas.
