La mitad del camino ya andado, por el único refuerzo de la Real del pasado mercado de invierno
La Real Sociedad no es muy dada a realizar incorporaciones en el mercado de invierno. El año pasado solo hizo una, pero eso sí, fue el refuerzo más caro de todos los llevados a cabo en LaLiga Santander en esta ventana. Carlos Fernández llegó al conjunto txuri urdin procedente del Sevilla FC por unos 10 millones de euros. El delantero firmó hasta 2027.
El de Castilleja de Guzmán está invicto esta temporada. Y es que cabe recordar que el sevillano se lesionó en el amistoso de pretemporada frente al AZ Alkmaar. El 31 de julio sufrió una rotura de ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha, y continúa con su recuperación. Su baja, unida a la salida de Willian José al Real Betis, hizo a la Real Sociedad reforzarse con Alexander Sorloth.
A mediados de noviembre la entidad guipuzcoana mostró unas imágenes con la buena noticia de que Carlos Fernández, tres meses después, volvía a ponerse las botas de fútbol para trabajar en el césped del José Luis Orbegozo. El de Castilleja de Guzmán empezaba a trabajar la movilidad y a reforzar musculatura, aunque lejos aún de tocar balón.
El sevillano es un jugador importante y de futuro en la plantilla dirigida por Imanol Alguacil, y que el curso pasado ya dejó muestras de su calidad y carácter. Ahora además que la Real está teniendo dificultades para materializar las ocasiones, aún se le echa más de menos. Pero su vuelta está un poquito más cerca. La buena noticia es que se van cumpliendo los plazos, y si todo evoluciona como se espera podría tener el alta médica a finales de febrero-primeros de marzo. Eso sí, después tendría que ir cogiendo poco a poco ritmo y dinámica de grupo. Pero todo lo que sea verlo progresar en Zubieta es ya un motivo de satisfacción.