Ganar vuelve a ser una obligación
{mosimage}{mosimage}Visto que la tranquilizadora renta con la quema se ha ido prácticamente al traste en el fatídico mes de diciembre y comienzos de enero, al Betis no le queda otra que ponerse el mono de trabajo y dejarse de excusas punteras antes de que el agua vuelva a llegarle al cuello. El rival de hoy no es precisamente el idóneo (para ello se supone que estuvieron antes otros como Espanyol, Athletic de Bilbao o Almería) pero la Liga no espera a nadie y menos a los irregulares. Llega la revelación de esta primera vuelta, el Málaga, acariciando Europa y con las ideas bastante más claras que en Heliópolis. Y por eso da la impresión de que Chaparro deberá recuperar la mejor versión de su Betis para salir triunfante y ahuyentar viejos fantasmas, algunos incluso ya revolotean sobre su cabeza.
Un solo punto sobre 15 posibles; también un solo gol en los últimos cinco partidos de Liga o cuatro jornadas seguidas sin ver puerta, como prefieran; el descenso a cuatro puntos, con Numancia a uno y Recreativo a dos (equipos con presupuestos ínfimos). Son datos que no pasan desapercibidos a los rectores del club, de ahí que sólo una victoria pudiera servir para al menos meter en la nevera una semana más esas dudas sobre el trianero. Y eso con el debut de Ricardo en Liga, y con la ausencia de Capi por una bursitis. El portugués centrará la atención de las cámaras y Rivera probará su valía ya con mayor continuidad. En definitiva, si la pelota entra o no, si el portero falla o es un acierto del delantero rival, si se lesiona fulanito o menganito, y si la abuela fuma, poco importa esta tarde en el Ruiz de Lopera. Hoy más que nunca, sólo valdrá el resultado. Siempre y cuando sea positivo…