El Cajasol se duerme y cae en Polonia (76-67)
El Cajasol de Sevilla ha caído derrotado este miércoles en el primer partido del Last 16 de la Eurocup. El conjunto hispalense, encuadrado en el grupo K, perdió por 76-67 ante el Stelmet Zielona Gora después de conceder numerosas facilidades.
Y eso que los de Aíto García Reneses llegaron al descanso en ventaja, siete arriba. Aunque lo cierto es que los cajistas no consiguieron hacer sentir realmente incómodo al cuadro local en todo el encuentro. El Stelmet no estuvo acertado, pero el Cajasol no aprovechó sus mejores minutos para ampliar las diferencias y acabó pagándolo por su falta de concentración.
Empezó entonado Holland, y contribuyó todo el equipo. Incluso un Bogdanovic que no asumió galones y pasó casi desapercibido. También Williams, que firmó dobles figuras. Con Satoransky intentando llevar las manijas del juego visitante, el Cajasol parecía superior. Sroka y Borovnjak, no obstante, acortaron distancias antes de que finalizara el primer cuarto (15-17).
Y Hodge, líder de los polacos, lo igualó nada más comenzar el segundo. Ello después de un parcial de 11-0 que Joan Sastre se encargó de romper a continuación con un triple. El duelo entró en una fase de caos, de idas y venidas, desaciertos e imprecisiones. El Cajasol concedió demasiado, sobre todo desde el exterior, pero el Zielona Gora no estuvo fino. Esto permitió que los sevillanos llegasen al descanso venciendo 32-39.
Tras la reanudación, despertó Quinton Hosley, y condujo a los suyos hacia la remontada. Sobre todo a base de ímpetu, desde el inicio de esta segunda mitad. El tercer cuarto fue el mejor del cuadro polaco, que llegó al cuarto final habiendo igualado el marcador a 57, pero sobre todo con la sensación de creer en la victoria más que los de Aíto.
Gran segunda mitad también de Stevic, que fue un apoyo ideal para la dirección y acierto de Hodge, el hombre del partido. Joan Sastre fue el sostén del Cajasol en este periodo decisivo, pero sus ganas de comandar el juego no fueron suficiente. Ni siquiera un triple con el que frenó la escapada local, inevitable finalmente. El Stelmet fue aprovechando con el paso de los minutos las facilidades concedidas por el Cajasol, rompiendo con asiduidad su frágil línea defensiva; los hispalenses se durmieron en el descanso y acabaron sucumbiendo (76-67).