Rusescu, cedido al Steaua
Salvo giro inesperado, el Sevilla no incorporará a nadie más antes del cierre del plazo de fichajes. El fichaje a última hora de Stephane M’Bia deja la plantilla cerrada, cumpliendo de esta forma el deseo de Unai Emery de sumar un nuevo efectivo, tal y como demandó tras el partido ante el Espanyol en la rueda de prensa. Sin embargo, el trabajo de la secretaría técnica Sevillista, a pocas horas para que termine el plazo de inscripciones, aún no ha acabado.
Tras rescindir el contrato de Miroslav Stevanovic la pasada semana, en el Sevilla aún tienen que colocar a uno de sus descartes. Así, Babá Diawara, que entrena aparte desde que comenzara la pretemporada, sigue sin encontrar acomodo. En las últimas horas, el mejor colocado para llevarse a Raul Rusescu, otro de los jugadores con los que Emery no contaba, era el Steaua de Bucarest, según recogían diversos medios rumanos, algo que ha hecho oficial el club este mediodía. El ariete vuelve a su exequipo en calidad de cedido con opción de compra. Más complicada parece la situación de Babá. El delantero senegalés tiene varias propuestas de liga portuguesa. Su alta ficha, sin embargo, es el principal escollo, pues los equipos que lo pretenden no pueden asumir su salario.
Por otro lado, están los casos de Piotr Trochowski y Cicinho. En principio, Unai Emery le comunicó al lateral brasileño que no contaba con él, tal y como desveló el propio jugador en su cuenta oficial de Instagram. El jugador, sin embargo, sí tiene ficha y el Sevilla, a priori, le daría dorsal en caso de no encontrar sitio en otro club, aunque no entraría en la lista europea (sólo se pueden inscribir 21 profesionales no canteranos). La situación de Trochowski es similar. El alemán sigue recuperándose de los problemas que padece en la rodilla operada y en el club piensan que lo mejor para las dos partes es buscar una salida, aunque no se forzaría al jugador. En caso de no encontrar un nuevo destino, algo probable, el jugador tendría dorsal, pero no tendría sitio en Europa. Cristóforo, por su parte, ultima la recuperación de la rotura de ligamentos de la rodilla sufrida a finales de marzo. El club cuenta con el jugador, a pesar de que no le inscribirá en la lista de la Liga Europa. El uruguayo podría salir cedido en enero.
