Lo último en que piensa Merino es su puesto de trabajo...

Los cantos de sirena que se escuchan a diario alrededor del banquillo del Betis no quitan el sueño a Merino. El técnico verdiblanco sólo piensa en ganar este sábado en Lugo, del resto no se preocupa. Es un hombre de club y habla y se comporta como tal. Tampoco pone fecha a su estancia en el banquillo. Entiende que está ante la oportunidad de su vida y no piensa despistarse con factores externos.

En este sentido, el linense asegura que “vamos a hacer todo lo posible por ganar. Trabajo con esa ilusión, no voy más allá. Pensar en más allá es desgastarse. Me encuentro con fuerza, con las decisiones que tenga que tomar muy claras. Las voy a tomar hasta el último día que esté”. Es más, el hecho de que el club esté mirando otras opciones para el banquillo mientras él se encuentra en el día a día lo ve normal, en ningún caso considera que sea una falta de respeto. Más bien piensa lo contrario: “Noto que tienen toda la confianza del mundo. Así me lo han mostrado desde el primer día. Estoy muy protegido por ellos, confiaron en mí en su momento. El tiempo que esté me es igual, lo que quiero es ganar. La confianza que me han dado debo transmitírsela al equipo para sacar buenos resultados. Pienso en el partido de mañana, no en el tiempo que voy a estar”.
Merino ni siquiera está preocupado por el número de partidos que puede estar en el banquillo del primer equipo para poder volver sin problemas al filial. Es decir, tampoco le quita el sueño que esta situación transitoria le pueda dejar sin el banquillo del primer equipo y sin el del filial. “Por mucha información que leamos, a ciencia cierta no se sabe. El club me pidió ayuda poniéndome de entrenador. Egoístamente hubiera preferido otras cosas, como haber asegurado mi puesto de trabajo. No me desgasto en lo que puedo hacer y si puedo volver o no al Betis B. Ahora estoy en el primer equipo y lucho con todas mis fuerzas. Ellos y yo deseamos que el equipo gane. La preocupación en otras cosas no la tengo. Estoy mentalizado únicamente en el equipo, no sé si voy a estar un partido más, dos o tres. No me desgasto en ello. El tiempo que tenga que estar debo dar el 100% de mis posibilidades”.
De hecho, prefiere no darle vueltas a la posibilidad de quedarse fuera del club. Ni se lo plantea. "De eso no hemos hablado. Cuando subo al primer equipo, no miro contrato ni años. Sólo voy con la ilusión tremenda de hacerlo bien y darlo todo como entrenador. No miro letras ni números. No tiene validez ninguna, el club está por delante de todos nosotros. Estoy intentando lo hacerlo lo mejor posible y dándolo todo por este club”, afirma.