La pobre herencia de Maciá

La labor de Miguel Torrecilla en su primer verano como director deportivo del Real Betis Balompié ha sido ardua y, por momentos, también bastante complicada, sobre todo en el capítulo de las salidas. El salmantino ha hecho una gran revolución de la plantilla, dando bajas y fichando jugadores por doquier.

Uno de los grandes problemas que se ha encontrado ha sido el pobre rendimiento de la mayoría de los jugadores que llegaron la temporada pasada, cuando Eduardo Maciá ocupaba su puesto en la dirección deportiva verdiblanca.
Con el valenciano llegaron al Betis hasta trece jugadores: Joaquín, Petros, Piccini –al que se compró tras una temporada cedido-, Pezzella, Van der Vaart, Vargas, Tarek, Digard, Van Wolfswinkel y Westermann llegaron en verano; y Musonda, Martín Montoya y Leandro Damiao lo hicieron en el mercado invernal.
De ellos, apenas cinco continúan en el club heliopolitano unos meses después. Son los casos de Joaquín, Petros, Piccini y Pezzella, además de Musonda, por el que se ha conseguido una nueva cesión.
Así pues, hasta ocho de las apuestas de Maciá han acabado abandonando el Betis. Van der Vaart, el gran fiasco de todos sus fichajes, se ha ido al Midtjylland danés cedido por dos años y con el Betis haciéndose cargo de parte de su ficha. Tarek se fue cedido al Columbus Crew norteamericano en invierno, y después al Ismaily egipcio, donde apenas duró un mes. Por su parte, Leandro Damiao solo duró cuatro meses en Heliópolis y ahora juega en el Flamengo.
Esos son quizás los tres grandes fracasos de Maciá, pero hay otros cinco hombres que no siguen en el Betis. Van Wolfswinkel regresó de su cesión al Norwich City para acabar en el Vitesse holandés; Westermann rescindió su contrato y a las pocas horas se comprometió con el Ajax de Ámsterdam; Martín Montoya acabó su cesión, volvió al Barcelona y después fichó por el Valencia; Digard fue cedido a última hora al Osasuna; y Vargas rescindió casi sobre la bocina.
En total, sólo un 38% de los fichajes de Maciá le han servido al primer proyecto de Torrecilla en el Real Betis Balompié.