El fútbol vuelve a ser el protagonista en el Betis

Un partido vuelve a escena después de dos largas semanas, en las que entre el parón y los asuntos institucionales, el fútbol quedó en un segundo plano de la actualidad en el Betis. Los verdiblancos visitan este viernes (20.45 horas) el RCDE Stadium para enfrentarse al Espanyol. Será el primero de los diez últimos encuentros ligueros de la temporada.

Atrás quedan días en los que el pacto entre el club y Bitton Sport, junto con todas las reacciones posteriores de los actores de esta historia, coparon la primera plana. Regresa ahora el fútbol, lo que realmente apasiona a los aficionados. El reto de conseguir dos victorias seguidas por primera vez en la temporada, o la complicada lucha por la décima plaza de la clasificación son algunos de los ingredientes extras de este encuentro.
El Betis llega de ganar a Osasuna, allá por un lejano viernes antes del parón por las selecciones, y busca enlazar dos triunfos seguidos. Un hito que no ha logrado en toda la campaña y que demuestra uno de los problemas verdiblancos de esta temporada, que no es otro que la irregularidad. Algo que debe dejar atrás si quiere seguir aspirando a la décima plaza.
El cuadro de Víctor tiene nueve puntos de desventaja respecto al décimo puesto, objetivo marcado al comienzo de temporada. Desde la decimotercera plaza que ocupa tiene el complicado reto de levantar ese hándicap con sólo 30 puntos en juego. Por eso no le queda otra que ganar y encontrar la regularidad para, además, endulzar los sinsabores deportivos de la temporada.
El primer escalón es el Espanyol, un rival que es noveno y que ha ido encontrando su identidad con el paso de las jornadas. Cierto es que los verdiblancos guardan un magnífico recuerdo de su última visita a Cornellá. Un 0-3 con Juan Merino en el banquillo, en marzo de 2016, curiosamente en el primero de los dos partidos que el Betis ganó seguidos por última vez.

Bruno por el lesionado Mandi

No se espera que Víctor Sánchez del Amo plantee demasiados cambios respecto al equipo que venció a Osasuna. Uno será obligado por la lesión en una mano de Mandi. El argelino era uno de los habituales del técnico en la zaga y dará paso, con casi toda probabilidad, a Bruno. El canario tendrá una nueva oportunidad para reivindicarse después de una temporada irregular.
Todo apunta a que el resto serán los habituales. Sin Piccini en la convocatoria se cae una de las posibles dudas. El buen hacer de Rafa Navarro en el último partido tendrá continuidad. Durmisi debe estar en el otro carril, pese a haberse perdido algún entrenamiento con el grupo por su participación con Dinamarca. Igual que Tosca, pese a su cita con Rumanía, en el centro de la defensa junto Pezzella y la citada novedad de Bruno. 
De ahí hacia adelante tampoco se intuyen cambios. Pardo, Ceballos y Brasanac han configurado un línea de mediocampo asentada en los últimos tiempos. Arriba Rubén Castro y Sanabria tienen todas las papeleta para seguir siendo la dupla de ataque. Otra cuestión es que Víctor mire de reojo a la triple jornada que tiene por delante, con partido intersemanal el martes ante el Villarreal, y dé refresco a algún jugador de ataque.
Los verdiblancos, siempre arropados por la numerosa hinchada bética en la llamada 'novena provincia', se medirán a un Espanyol que quiere apurar sus opciones de clasificarse para Europa. Lo más llamativo del cuadro periquito es que Quique Sánchez Flores ha dejado fuera de la convocatoria a Hernán Pérez. El paraguayo llegaba de los partidos con su selección. El ecuatoriano Caicedo y el mexicano Diego Reyes sí han entrado en la lista.
El técnico blanquiazul recupera para la cita a Piatti, José Antonio Reyes -siempre con el morbo que suponen sus enfrentamientos contra el Betis- y el meta Roberto. El Espanyol, que ya ganó en el Benito Villamarín en la ida en el último partido de Gustavo Poyet como local, se ha hecho un equipo especialmente fuerte en casa. Así lo atestiguan sus cuatro victorias en sus cinco comparecencias recientes en Cornellá.