Un verano para sudar la gota gorda

El Sevilla FC ha salvado los muebles en Liga confirmando el séptimo puesto, un mal menor teniendo en cuenta la deriva que había tomado el equipo hasta que Joaquín Caparrós se hizo cargo de él.

Esa posición le obliga a jugar tres rondas previas para clasificarse para la fase de grupos de la Europa League, aunque queda una opción remota de que sean sólo dos si el Olympique de Marsella gana la final de esta competición este miércoles al Atlético de Madrid. En todo caso, de ser así debería confirmarlo la propia UEFA.
En todo caso, lo que de momento está fijado es que el Sevilla empezará a jugar el 26 de julio de forma oficial, apenas 11 días después de que acabe el Mundial de Rusia. Ese jueves jugará la ida de la segunda ronda de clasificación para la Europa League, disputando la vuelta el 2 de agosto.
A partir de ahí empieza el carrusel, pues en principio el 5 de agosto será la ida de la Supercopa de España; el 9 de agosto la ida de la tercera ronda de clasificación, el 12 la vuelta de la Supercopa de España y el 16 la vuelta de la tercera ronda.
Ya el fin de semana del 19 de agosto comenzará la Liga, pero el 23 de agosto, en caso de superar las dos rondas anteriores, se jugará la ida del play off de acceso a la fase de grupos de la Europa League. El 26 será la segunda jornada liguera y el 30 la vuelta del play off.
En total, 10 partidos oficiales entre julio y agosto que se completarán con la disputa de la tercera jornada de Liga el fin de semana del 2 de septiembre, antes del primer parón por selecciones.
Pero hay más, y es que el Sevilla tiene confirmada su presencia en la International Champions Cup, con partidos ya fijados. Serían el 21 de julio en Zúrich ante el Benfica, el 28 de julio en Varsovia contra el Chelsea y el 7 de agosto ante el Inter en Lecce. Sin embargo, ante la profusión de encuentros oficiales su participación en tan prestigioso torneo queda en el aire, tal y como expuso en su día el club.