Comienza la semana que regaló Caparrós

Hace apenas quince días nadie pensaba que el Sevilla FC llegaría al 14 de mayo con la clasificación europea en el bolsillo y con la tranquilidad de jugar la última jornada sin la necesidad de ganar para conseguir el objetivo.

Y todo gracias a Joaquín Caparrós, que cogió un equipo muerto y en tres partidos ha sido capaz de sacar siete puntos de nueve en disputa, algo que no lograba desde principios de diciembre, cuando ganó tres partidos seguidos en Liga ante el Celta, el Villarreal y el Deportivo de La Coruña.
Así, y tal y como el utrerano recordó en la sala de prensa del Benito Villamarín, el Sevilla ha ganado una semana para empezar a planificar la próxima temporada, un ejercicio que comenzará en poco más de dos meses de forma oficial, pues la segunda ronda previa de la Europa League se jugará a partir del 26 de julio.
La primera decisión que debe tomar la entidad de Eduardo Dato es la de elegir el director deportivo, después de que Óscar Arias fuera destituido hace ya tres semanas. El mejor colocado es Antonio Cordón, aunque desde Italia apuntan al nombre de Omar Milanetto. Sea como fuere, ésta será la primera piedra del proyecto y cuanto antes llegue mejor para todos.
A partir de que llegue el director deportivo se deberá afrontar el otro gran pilar de la planificación: encontrar entrenador. Han sonado muchos nombres, entre ellos Manuel Pellegrini, la opción con más caché y que vendría de la mano de Cordón, y Pablo Machín, que ha aplazado su continuidad en el Girona por lo que pueda pasar.
También urge conocer qué pasará con los cedidos. En los contratos de cesión de Roque Mesa y Miguel Layún aparece una opción de compra que el Sevilla deberá decidir si ejercer o no. Los dos han dicho en innumerables ocasiones que quieren quedarse. El otro caso es el de Sandro, que aunque no tiene una opción de compra concreta incluida en el contrato, también tiene papeletas de seguir en Nervión. Por su parte, Carole volverá al Galatasaray y Geis, salvo sorpresa, al Schalke 04.
Por último, el cuarto caballo de batalla del Sevilla en estas fechas es, precisamente, encontrarle un lugar a Joaquín Caparrós. El utrerano llegó como entrenador para cuatro partidos y, tras ellos, tomaría responsabilidad en otro área del club. De momento, no está definida cuál será su función, algo que deberá concretarse en cuanto se acabe la Liga.