¿Qué va a pasar con Gnagnon?
Se acerca el mercado de invierno y, teniendo en cuenta lo bien que le están yendo las cosas al Sevilla FC, va a haber movimientos, ya que la dirección de fútbol que comanda Joaquín Caparrós quiere darle a Pablo Machín todos los mimbres necesarios para completar una temporada histórica. Para que esto suceda también tiene que haber salidas, y una de las señaladas es la de Joris Gnagnon.
El club pagó en verano aproximadamente 14 millones de euros por uno de los centrales más prometedores del fútbol francés, pero hasta el momento no ha dado ni mucho menos el rendimiento esperado en los partidos que ha jugado.
Hasta el momento, Gnagnon ha disputado un partido de LaLiga Santander, otro de la Copa del Rey y seis de la Europa League, siendo dos de ellos de la fase de grupos, y su rendimiento se puede calificar, cuanto menos, de discutible.
Además, ha tenido que ser sometido a un plan específico para bajar de peso, tal y como desveló ElDesmarque, en el que ha perdido ya más de diez kilos. De hecho, su cambio físico es evidente, aunque de momento no se nota demasiado en el juego.
La afición del Ramón Sánchez-Pizjuán ya le pitó en el partido liguero ante el Getafe, y en el último partido, ante el Akhisarspor en Turquía, salió en la foto de los dos goles de los otomanos. Además, Pablo Machín le ha dejado fuera de las convocatorias en numerosas ocasiones y prefiere contar con su compatriota Amadou para jugar como central, pese a que ese no es su puesto específico.
Con todo, en el Sevilla tienen la esperanza de que Gnagnon crezca y dé el rendimiento esperado, aunque a partir de enero podría hacerlo como cedido. El futbolista sigue gozando de un buen cartel en Francia –de hecho es un habitual con la sub 21- y su club de origen, el Rennes, ya ha preguntado por él. Incluso se habla de un interés del Olympique de Marsella, donde Caleta-Car no está dando el rendimiento esperado.
En Nervión necesitan un central con experiencia que apuntale una línea que está sufriendo mucho con las lesiones, motivo por el que es aún más complicado dar minutos a Gnagnon y por el que el zaguero francés tiene todas las papeletas para marcharse cuando se abra la ventana de fichajes.
