El Sevilla mira al Villarreal con la sociedad Ben Yedder-Sarabia afinada
El Sevilla volvió este viernes al trabajo después de tomar ventaja en los dieciseisavos de la Liga Europa con su triunfo en la ida ante el Lazio (0-1), en Roma, y prepara ya la cita del domingo en Villarreal, en su retorno a LaLiga, con la sociedad Ben Yedder-Sarabia perfectamente afinada.
En el estadio Olímpico romano, los sevillistas rompieron una racha de tres partidos sin ganar, tras perder 6-1 ante el Barcelona en los octavos de Copa y 1-0 con el Celta en Liga, y de empatar 2-2 en casa la pasada jornada contra el Eibar, y de nuevo fue decisivo el dúo letal que conforman Wissam Ben Yedder y Pablo Sarabia.
El pequeño delantero franco-tunecino batió en el minuto 22 al meta griego de origen albanés Thomas Strakosha, un gol que tiene un gran valor para la vuelta del próximo miércoles en el Ramón Sánchez Pizjuán, tras mandar al fondo de la red una asistencia desde la izquierda de Sarabia, rey indiscutible del Sevilla en esa faceta.
De nuevo, la conexión entre ambos, la clarividencia y el olfato goleador que demuestran el menudo atacante de Sarcelles -norte de Francia- y el centrocampista madrileño, le dio frutos al equipo de Pablo Machín.
No en vano, esta campaña son, de largo, sus máximos artilleros. Ben Yedder lleva 20 dianas (11 en Liga, 7 en Europa y 2 en Copa); y Sarabia, pitado la pasada jornada por parte de su afición a cuenta de su enquistada renovación, 18 (9 en la competición liguera, 7 en la continental, 1 en el torneo copero y 1 en la Supercopa europea), cifras que aquilata, además, con 10 asistencias hasta ahora.
Los nervionenses intentarán ahora refrendar la evidente mejoría exhibida ante al Lazio, tras el bache sufrido en sus tres partidos anteriores, en el Estadio de La Cerámica, donde le espera un Villarreal acuciado, penúltimo en la Liga, pero que también volvió a sonreír en la Liga Europa al ganar 0-1 al Sporting de Portugal.
El regreso a los entrenamientos de la plantilla sevillista estuvo marcado por el buen ambiente y las caras alegres tras el primer golpe asestado al Lazio en Roma, a pesar de que el éxito no fue completo al no sentenciar la eliminatoria en alguna de las numerosas ocasiones de gol que generó con rápidos contraataques.
Tras volver de madrugada a la capital andaluza, el Sevilla, que sigue cuarto en la Liga pero ha visto cómo sus perseguidores (Getafe y Alavés) le han recortado su renta a dos puntos, se ejercitó en su Ciudad Deportiva con la mente puesta en la visita al Villarreal, en la que será baja por sanción el argentino Éver Banega, al igual que en la vuelta frente al Lazio.
Los jugadores que fueron titulares en el Olímpico de Roma hicieron trabajo de recuperación sobre el césped, en lugar de en el gimnasio, como en otras ocasiones después de un partido, mientras que el resto del plantel tuvo un entrenamiento más exigente, informó el club.
Los sevillistas volverán a ejercitarse el sábado en la Ciudad Deportiva del club, en este caso por la tarde, justo antes de viajar a la localidad castellonense.