El otro derbi sevillano que existió con aires árabes
Sevilla FC y Real Betis. Rojo y verde, pasión y esperanza, Nervión y Heliópolis. Dos equipos que forjaron la rivalidad más bella y poética que existen. Los únicos capaz de dividir una ciudad para luego unirla, de hacerla temblar y palpitar. La que se olvida de la gloria y saborea el infierno. Una pasión inexpugnable, que brinda al mundo el que para muchos es el derbi más atractivo del planeta.
No obstante esta dualidad tuvo un tercer 'amante' allá por los años 50. Una entidad con aires árabes que acentuó la rivalidad a poco menos de 250 kilómetros de distancia. Un club inspirado en la pasión sevillista y que alcanzó su máximo esplendor precisamente contra el Real Betis.
Allá por 1938 se fundó en Tánger, cuando Marruecos formaba parte del Protectorado español, la Unión Deportiva Sevillana. Popularmente conocida como 'La Sevillana', fue fundado por unos sevillanos de la zona que buscaron tener a 250 kilómetros un trocito de su casa. Por aquel entonces jugaba sus partidos en el Estadio de El Marchán, cerca de la calle Sevilla de Tánger, y que cada semana alcanzaba los 15.000 espectadores. Por aquel entonces convivía con varios equipos, siendo su máximo rival el Unión Deportiva España. Su escudo se inspiró ciertamente en el del Sevilla (se dice que lo fundaron sevillistas) y vestían camiseta blanca con calzonas y medias negras.
Y, casualidades del destino, alcanzarían su techo histórico ante el Real Betis. Fue tras su ascenso a Tercera División (51-52), cuando el destino los pondría contra un equipo golpeado por la guerra. Una cita que se convirtió en el evento del año, pues la mayoría de ellos tenían el corazón dividido.
En aquella 52,53, 'La Sevillana' sorprendió a todos tras empatar en Sevilla al Real Betis. Pero el cenit llegaría unos meses más tarde, donde un abarrotado El Marchán disfrutó de la victoria 2-0 ante el Real Betis, con un doblete de Pahiño. "El Betis se empleó a fondo ante un equipo, que en tarde de inspiración, las daba todas, sin dar respiro a sus propios jugadores", recitaban los diarios de entonces.
Un acicate para los verdiblancos al próximo año, que se cebaron de una Unión Deportiva Sevillana que daría sus últimas bocanadas de vida. Aquel año el equipo de Tánger descendió con 96 goles en contra y perdieron sendos partidos contra el Real Betis (0-2 y 6-2). Luego mantendría la categoría por la reagrupación de Tercera pero ni siquiera llegaría a empezar el campeonato. Un equipo que por aquel entonces convivía con otros equipos españoles en Marruecos, como el Atlético Tetuán (jugó en Primera) el FC Iberia o la UD España y que llevó la ciudad de Sevilla al actual estado magrebí.
¿Un equipo golpeado por la guerra? A ver si repasamos la historia y dejamos los mitos a un lado, que se supone que está usted haciendo periodismo. Vaya tela el nivelito...