Competir no basta al Coosur Real Betis en el derbi andaluz (79-71)
El derbi andaluz se queda en casa. El Unicaja, que ofreció una versión coral este domingo en el Carpena, venció al Coosur Real Betis por 79-71 y consigue su cuarta victoria de la temporada en la Liga Endesa. El Coosur Real Betis compitió, pero no le fue suficiente para mejorar sus registros en la vuelta a la máxima competición del básket nacional.
Hasta cinco jugadores cajistas superaron la barrera de los diez puntos frente a un equipo sevillano al que no bastó con la aportación de un inspirado Oliver y Slaughter. Ahí estuvo la diferencia para los locales ante un cuadro bético que acumula cinco derrotas y dos victorias en este inicio liguero.
Empezó muy acertado el Betis, pero el Unicaja respondió a base de triples, dos del enchufado Adams, uno de Waczynski y uno de Thompson. Más inspirado aún arrancó Obi Enechionyia, que firmó 9 de los primeros 11 puntos del equipo verdiblanco. Mejoraron en defensa los de Casimiro y la entrada de Gerun permitió anotar también en la pintura, terminando el primer cuarto con clara ventaja cajista (23-14). Llamó la atención que no saltara a la pista Carlos Suárez, pero el madrileño ni se vistió este domingo finalmente por una gastroenteritis.
Gerun seguía haciendo mucho daño al Betis en el poste bajo, pero los sevillanos aprovecharon el acierto de Oliver y Slaughter, que volvió tras torcerse el tobillo en el arranque, para acercarse en el electrónico (31-29 a 3 minutos para el descanso). Bajaron los porcentajes de acierto por parte del Unicaja y fue Toupane el que dio de aire a los cajistas, que recuperaron cierta renta antes de que los equipos se marcharan a los vestuarios (40-32).
Reacción bética tras el descanso
Los de Curro Segura volvieron a la pista con mejores sensaciones y recortaron distancias hasta empatar a 46 en el ecuador del tercer periodo tras un triple de Oliver, especialmente acertado desde los 6,75 y liderando a los suyos. Waczynski y Toupane respondieron con sendos triples poniendo un 6-0 de parcial, pero el veterano base del Betis seguía haciendo daño y las fuerzas estaban muy igualadas (57-54 al final del tercer cuarto).
Todo se iba a decidir en los últimos diez minutos, y el Unicaja comenzó mucho más metido en el partido, sobre todo en defensa. Sólo el rebote ofensivo mantenía ligeramente con vida a un Betis 'tocado' que no encontraba la manera de anotar, mientras que los de Casimiro lo hacían de manera conjunta y coral. Pero los sevillanos no se rendían y un par de canastas seguidas de Slaughter mantenían viva la ilusión de la remontada en el Carpena a 3' para el final. Un triple de Waczynski tras un tiempo muerto puso la puntilla al Betis, que dio guerra pero acabó sucumbiendo ante un coral Unicaja (79-71).