San Mamés y la última gran exhibición de Banega en LaLiga

El sevillismo sigue echando de menos a Éver Banega. El argentino ha sido de los jugadores con más calidad que han pasado por el Sevilla FC y aún muchos recuerdan sus mejores actuaciones cuando se cumplen algo más de dos meses de su salida de Nervión con destino al Al-Shabab saudí.

Este sábado, el equipo de Julen Lopetegui visita San Mamés, uno de los escenarios más importantes de LaLiga Santander, y el lugar donde el rosarino ofreció su última gran exhibición en el campeonato liguero en el partido ante el Athletic Club de la jornada 35.

Especialmente, Banega dejó una segunda parte extraordinaria en el coliseo bilbaíno. El argentino asumió el mando del partido, marcó un golazo de falta y dio e Munir el segundo y definitivo gol del Sevilla con una asistencia extraordinaria.

Su gran partido no se quedó ahí. Además de las acciones que desencadenaron la victoria del Sevilla, el centrocampista también dejó una acción individual propia de su clase. Con frialdad y maestría, Banega se colocó en su propia área para sacar la pelota jugada. Ahí recibió la presión de Sancet y con un breve recorte hacia afuera, el argentino regateó al futbolista del Athletic con una facilidad pasmosa. Los nervios los dejó a un lado.

Ya en la segunda parte, el argentino apareció para decantar el partido con dos acciones dignas de su clase. Hay que recordar que Banega había terminado su contrato con el Sevilla el 30 de junio, pero tanto el club como el jugador decidieron alargar el compromiso hasta que el equipo termine de competir en el mes de agosto. Entonces, el de Rosario se marchó como quería, como en 2016, con la plata de la Europa League bajo el brazo y siendo el jugador clave en otro título europeo del Sevilla.