En plena cuesta de enero

Aunque el año comenzó para el Betis con dos victorias, el paso de los días se ha convertido en una auténtica cuesta de enero para el conjunto verdiblanco. El último ejemplo sucedió este sábado en el RCD Stadium donde los de Pellegrini perdieron ante el Espanyol dejando unas sensaciones muy frías y con pocas ocasiones de gol.

Son tres resultados negativos encadenados, cada uno de ellos con sus matices evidentemente. Pero tras las decepciones de la Supercopa de España y la Copa del Rey, el Betis no supo alimentar nuevas ilusiones en la novena provincia y cayó derrotado en un estadio en el que no conviene dejarse puntos para mantenerse en la pelea europea.

Fue un Betis apagado, solo con chispazos de William Carvalho, al que le faltó frescura. Tal vez pesara la prórroga de hace tan solo tres días contra Osasuna, tal vez el equipo eche de menos a jugadores de la trascendencia de Fekir o Juanmi. El caso es que los verdiblancos, esta vez de naranja, no reflotaron precisamente frente al Espanyol.

Con todo, el paradigma del momento del Betis se produjo poco antes del descanso. Del posible 0-1, con un cabezazo de Borja Iglesias respondido con agilidad por Álvaro Fernández, se pasó al 1-0 con el gol de Braithwaite casi en la jugada inmediata. Un resumen de lo que le sucedió al equipo bético en Cornellá, aunque ni mucho menos se puede considerar cuestión de fortuna.

Y es que ni en la primera parte, cuando el marcador señalaba el empate, ni en la segunda, ya con el resultado en contra, el Betis dio señales apabullantes de poder empatar. Sí insistió, sí buscó la meta contraria, pero pocas veces encontró resquicios en la organizada defensa periquita. Toca resetear ahora con más tiempo entre partidos.

Abner Vinicius fue la gran novedad que planteó Manuel Pellegrini en la alineación. El brasileño, que ya debutó contra Osasuna, estrenaba titularidad con el Betis apenas una semana después de su fichaje. Aitor Ruibal, Pezzella, Guardado y Borja Iglesias fueron los otros cambios introducidos por el Ingeniero en el once ante el Espanyol.

Cabrera lanzó la primera amenaza al Betis con un cabezazo al larguero (4'). Los primeros minutos transcurrieron con un ritmo lento y con más posesión para los periquitos que a balón parado, no solo en la pelota al travesaño, creaban problemas. En defensa se esmeraba Edgar para achicar cualquier tipo de centro al área heliopolitana.

Con el paso de los minutos empezó a tomar fuerza la sociedad Guardado-Canales por la izquierda. En la otra banda, con menos protagonismo, Luiz Henrique lo intentaba de lejos buscando a sorprender a Álvaro Fernández (17'). El fútbol de Betis giraba alrededor de William Carvalho que daba toda una masterclass de control y pase. Un pase suyo filtrado lo terminó sin ver portería Luiz Henrique.

Aitor Ruibal en una diagonal finalizó con un disparo centrado con la zurda (23'). La réplica local fue un remate de Braithwaite a quemarropa al que estuvo atento Bravo (24'). Ya por entonces el partido servía para concluir los interesantes conceptos defensivos de Abner en el lateral zurdo. También en el otro lateral se tenía que aplicar Aitor Ruibal.

Precisamente un centro de Aitor Ruibal propició la ocasión más clara del Betis. El cabezazo cruzado de Borja Iglesias fue rechazado con un paradón por Álvaro Fernández (42'). Del casi 0-1, se pasaba al 1-0. Braithwaite remataba el corazón del área un servicio desde la izquierda de Oliván, que desviaba levemente Aitor Ruibal (43'). Cruel castigo.

Segunda parte

Oliván trató de sorprender sin éxito a Bravo al poco de iniciarse la segunda parte (48'). Luego llegaron dos polémicas, una en cada dirección. La primera una petición de mano en el área de Óscar Gil. De seguido un gol anulado a Aleix Vidal por un manotazo de Puado a Aitor Ruibal en la acción previa. Canales, en un lanzamiento de falta, sumó la primera oportunidad para el Betis (56').

Rodri entraba por Guido Rodríguez y Guardado retrasaba su posición. Pellegrini necesitaba reactivar a su equipo al que le costaba inquietar al Espanyol. Pudo ser peor para el Betis, de no ser por el fallo de Puado quien, con todo para marcar, no atinó (64'). Luiz Henrique daba un paso adelante en busca de más mordiente con algunas acciones personales.

Las contras del Espanyol, con Puado, generaban problemas. Aunque dominaba la pelota, al Betis le costaba desequilibrar. De ahí que Pellegrini sacara al campo a Joaquín, en busca de uno contra uno. Lo hacía por Guardado. Una elaborada jugada bética era finalizada con un tiro de Canales, que la poblada defensa local repelía (77'). Con un Rodri muy activo, el conjunto bético metía una marcha más.

Canales ejecutaba una chilena, que paraba Álvaro Fernández (79'), antes de que Miranda y Willian José entraran por Abner y Luiz Henrique. Dos delanteros puros en el campo, ya que seguía el Panda. Pese a la insistencia, al Betis le faltaba la finura para hallar los resquicios en la zaga del Espanyol. La última fue para William Carvalho que desde la frontal lanzó alto (92'). Cayeron los de Pellegrini.