El valencianismo tiene mono de dos delanteros
El técnico del Valencia CF, Nuno Espirito Santo, cambió delantero por delantero a falta de un cuarto de hora y Mestalla le recriminó que no fuera más valiente, pero el técnico luso no quiso arriesgar en un partido que lo seguía viendo que caía del lado valencianista. Pasaban los minutos y el entrenador sabía que tarde o temprano llegaría la victoria, pero no ocurrió. Mestalla estaba impaciente y nerviosa porque veía que se podían escapar otros dos puntos del casillero y la afición, que continúa deseosa de ver a sus dos delanteros juntos y formando pareja de ataque, se puso nerviosa y silbó al técnico.
El partido necesitaba más locura y más dinamita para buscar ese segundo gol que dejara los tres puntos en Mestalla. Pero Nuno fue a lo seguro, no quiso arriesgar y priorizó el orden y el equilibrio a la locura de mover un sistema táctico que tenía maniatado al Depor lejos del área de Matt Ryan. El luso pensó que se podía ganar, pero también perder. No se iba a arriesgar. Pero ofensivamente el equipo seguía sin ofrecer muchas ocasiones: quizás la salida de Feghouli le dio mayor presencia por el flanco derecho pero poco más.
Negredo salió de titular ante el Depor y lo hizo por tercer partido consecutivo esta campaña; su rol está por delante de Paco Plcácer y el delantero madrileño sigue aprovechando su oportunidad con goles porque por segundo partido consecutivo volvió a ver puerta tras su espectacular tanto en el Stade Louis II de Mónaco y el de este domingo que sirvió para empatar el choque ante los gallegos. Además, a estos dos tantos hay que sumar sus buenas actuaciones en Vallecas y en la previa de la Liga de Campeones. Mestalla está recompensando a Negredo con su esfuerzo y éste a Mestalla con su buen olfato goleador.
Pero el público quería seguir viendo a Negredo sobre el césped y cuando vio que Alcácer iba a entrar en el terreno de juego, la afición pensó que era partido para ver a los dos puntas sobre el césped, algo que no ocurrió. El cuarto árbitro mostró la tablilla electrónica y vio el siete por el nueve. Mestalla se calentó y le dedicó una sonora pitada, mostrando su desacuerdo al portugués porque Mestalla tiene mono de dos delanteros. Alcácer la tuvo hasta en dos ocasiones, la primera con un disparo desde la frontal y luego cambiando la trayectoria de un balón que caía del cielo y que logró pinchar. Por separado los dos estuvieron muy bien, pero juntos, de momento, no se sabe en competición oficial.