El rediseño de Mestalla trajo más socios, más dinero y mejores resultados
En pleno debate en la calle sobre la venta de las parcelas de Mestalla y el traslado o no al Nuevo Estadio, la empresa encargada del rediseño del templo valencianista explica lo que supuso aquel lavado de cara y asegura que eso trajo al club más ingresos, más abonados y mejores resultados.
El Valencia en ningún momento se ha planteado no hacer el traslado, pero es evidente que el peso y el poso del coliseo valencianista está ahí. Al hilo de esta situación, Fran Carrasco, consejero delegado de la empresa valenciana Molcaworld en la que trabaja Amedeo Carboni, ha relatado en una entrevista a EFE que ofrecieron al Valencia "darle un cambio" al 'viejo' Mestalla tras la paralización de las obras del nuevo estadio.
"Con el Valencia veíamos que teníamos un estadio antiguo, con la asistencia bajando, y teníamos la idea de darle un cambio para generar mayores ingresos comerciales al club", asegura el dirigente de esta compañía. A raíz de la propuesta se cubrió la fachada con lonas con la imagen del equipo y los jugadores, añadió el icónico murciélago, cambió los colores de los asientos al color naranja formando un mosaico junto a un murciélago negro e hicieron reformas en los anillos de patrocinadores, pasillos y zonas de prensa. "El resultado fue un incremento notable en abonados, nuevos socios, ingresos comerciales e incluso en resultados deportivos", añade Carrasco.
Desde la mencionada empresa, durante todos sus años como proveedor del Valencia, se había defendido la idea de darle un cambio a Mestalla dado su estado de abandono a nivel de imagen. Fue a finales de 2013, cuando para sorpresa de todos teniendo prevista la apertura del nuevo estadio para 2018/19, el club decide activar un cambio de imagen del estadio para activarlo durante los años que le quedaban de vida. Molcaworld se adjudicó la implementación de ese proyecto y ayudó al club y su equipo, responsables del impulsó en ese momento dicho cambio.
"El resultado fue un incremento notable en abonados, nuevos socios, ingresos comerciales e incluso en resultados deportivos"
La empresa valenciana Molcaworld ya tenía con Mestalla el proyecto piloto que necesitaba para comenzar con su nueva línea de negocio. De hecho, fue responsable también de la transformación del Mestalla en Valencia, el Sánchez Pizjuán y el Benito Villamarín en Sevilla, pero siguiendo siempre cuatro claves que guían los proyectos de Molcaworld en los estadios, según su consejero delegado: revitalización de la marca, revalorización comercial, potenciar la conexión con el aficionado y motivar a los jugadores.
El Valencia CF sigue adelante con su planes
Al margen del debate suscitado socialmente, el Valencia CF sigue con su plan inicial de vender las parcelas de Mestalla y trasladarse al nuevo estadio de la Avenida de las Cortes Valencianas siempre y cuando sea posible. Las declaraciones del presidente Anil Murthy, en las que aseguraba que un 90% de los aficionados no quieren abandonar Mestalla han generado mucho revuelo hasta el punto que el alcalde de la ciudad, Joan Ribó, o el autor del Amunt València han entrado a analizarlas.
En concreto, la frase que disparó la alarma fue: "Nueve de cada diez personas a las que pregunto por la calle me dicen que no quieren cambiar. Si el 90% no quiere cambiar habrá que convencerlos de que es una buena idea. No queremos hacer este proyecto por hacerlo. Tenemos que trabajar en la parte financiera y en la idea".
No hay, aseguran desde el club, un cambio de rumbo en las intenciones del club. De hecho, el Valencia sigue teniendo la intención de cumplir el calendario que marca la Actuación Territorial Estratégica (ATE) "Valencia Dinamiza". Este documento compromete al propio Valencia CF y a las autoridades para que el cambio al nuevo estadio "sea una realidad en la temporada 21-22".
