Gameiro lo avisó y lo hizo posible
Quien avisa no es traidor y Kevin Gameiro lo dejó bien claro. "Desde hace seis años gano un trofeo cada temporada y espero conseguirlo también en el Valencia", aseguró el delantero francés el día de su presentación como jugador del Valencia CF. Lo avisó y él mismo se encargó de hacerlo posible. Suyo fue el gol que abrió el marcador en la final de la Copa del Rey del Benito Villamarín y abrió el camino hacia la victoria final.
Marcelino apostó por unir en ataque a Kevin Gameiro y Rodrigo Moreno. Ya lo hizo en el Camp Nou esta temporada y la jugada le salió redonda. El francés marcó y fue un incordio constante para la defensa azulgrana, buscando siempre explotar con su velocidad los espacios a la espalda de los centrales.
Kevin Gameiro avisó en su presentación que ganaría un título con el Valencia CF esta temporada y él mismo se ha encargado de que fuera posible
En el Benito Villamarín, el Valencia CF siguió el mismo plan y volvió a funcionar. Con la defensa del FC Barcelona muy adelantada, Gameiro se hinchó a tirar desmarques. Los de Mestalla no estaban finos con balón. De hecho apenas tenían el 13% de la posesión, pero a los 22 minutos trenzaron un contragolpe velocísimo con el que sorprendieron a la defensa del Barcelona.
Kevin Gameiro recibió en la frontal del área y no perdonó. Fusiló a Cillessen y mandó el balón al fondo de la portería para que adelantar al Valencia CF en el marcador. De este modo, el francés allanaba el camino para que se cumpliera su profecía.
A los 34 minutos, su compañero en ataque, Rodrigo Moreno, enmendó su error en la primera jugada del partido y firmó el 0-2 a pase de Carlos Soler. De nuevo un contragolpe letal para los de Marcelino que dejó herido de muerte al FC Barcelona.
En la segunda mitad los azulgranas recortaron distancias con un gol de Lionel Messi, pero el Valencia CF supo defenderse con uñas y dientes para mantener la ventaja, ganar la Copa del Rey y cumplir la profecía de Kevin Gameiro.
