El Levante saca pecho por Pablo Marí
El fútbol valenciano está de enhorabuena, y es que, Pablo Marí, un chico nacido en Almussafes (Valencia) el 31 de agosto de 1993, se ha convertido en el primer español en ganar la Copa Libertadores. El actual defensa central del Flamengo se ha proclamado campeón tras lograr una remontada épica ante River Plate, con goles en el 89' y 91' para ganar el encuentro 1-2 y hacer historia.
Uno de los protagonistas de este éxito ha sido Pablo ya que su entrenador ha apostado por el en los encuentros más difíciles del torneo y su rendimiento no ha dado lugar a dudas. Un rendimiento que comenzó a notarse en su primera etapa como futbolista, en el Levante UD y Valencia CF, ya que el jugador comenzó a formarse dentro del fútbol valenciano hasta que tuvo que salir dirección Mallorca para continuar con su carrera.
Tras lograr tocar el cielo y ganar la libertadores, el Levante UD no se ha olvidado de él y le ha querido felicitar a través de este tuit:
¡Enhorabuena @PabloMV5! Triunfo histórico el de hoy con el @Flamengo 👏👏👏👏 #Libertadores https://t.co/IaIG5hyNu3
— Levante UD 🐸 (@LevanteUD) November 23, 2019
¿Quién es Pablo Marí?
Marí, nacido en Almussafes (Valencia) el 31de agosto de 1993, (26 años), ha dado una lección de temple, colocación y juego aéreo que han contribuido para que su club elimine al Gremio por 5-0 y pueda regresar así a una final de la Copa Libertadores 38 años más tarde de su única final.
Central zurdo, corpulento y de 193 centímetros de altura, Marí también sirvió de válvula de escape. Se ofreció como opción de pase a sus compañeros ante la maraña táctica que planteó el Gremio. El valenciano retribuyó con una limpia salida del balón.
La noche del imponente Maracaná fue seguramente la más importante de su carrera deportiva, que comenzó en el Valencia -con seis años empezó a darle patadas al balón- y el Levante UD. En la edad de juveniles, con el club granota en crisis, Pablo emigró al Mallorca y siguió por el Gimnàstic de Tarragona.
En 2016 el Manchester City le contrató. Sin embargo, no debutó y marchó cedido al Girona, de la Segunda División española. Pasó al Breda, de la élite holandesa, y luego llegó al Deportivo de la Coruña, también en la Segunda española.
Pep Guardiola no le encontró acomodo y aceptó la oferta del Flamengo. Su técnico, el portugués Jorge Jesús, le consideró un perfil que se encajaba en la zaga tanto por su altura como por su salida del balón.