"Es normal que la gente tenga pesimismo y diga que este equipo baja"
Y Óscar González sacó su fusil. El salmantino, en una temporada aciaga a nivel individual y colectivo, compareció en la rueda de prensa con la claridad que ninguno de sus compañeros ha tenido en los dos últimos meses de competición, en los que el equipo se ha derrumbado sin que nadie ofreciese una explicación ni un dibujo de la realidad que vive el Real Valladolid. Óscar reconoce, para empezar, que en Vitoria apenas hubo opciones de sumar los tres puntos: "Kepa hizo dos o tres paradas buenas. El Alavés tiró mucho y fue superior", dijo en contradicción con lo que ayer expresaban, entre otros, Javi Moyano.
El mediapunta asume que las sensaciones son "malas, volvimos a perder y son muchos partidos sin ganar". Además, no da por hecha la permanencia: "Hoy por hoy no hay nada seguro. Estamos peleando y lo que hay que hacer es mirar a los de abajo y esperar que no sumen y nosotros intentar sumar cuanto antes". Óscar piensa que el único objetivo en las cinco jornadas que quedan debe ser "salvar la temporada. Conseguir dos victorias, que creo que son las que nos hacen falta, y que los de arriba preparen el año".
La única excusa que pone es que "no es fácil la Segunda. Y este año todo el mundo está fallando. El primero acabará con menos puntos que los que conseguimos nosotros el año pasado".
El único aspecto que salva el canterano es el físico, ya que cree que "estamos bastante bien". En cuanto al estado anímico, admite que "hay pesimismo, pero es normal. Si de siete partidos hemos conseguidos dos puntos, y en el descuento, normal que la gente tenga pesimismo y diga que este equipo baja".