Paco Herrera ya muestra su libreta de juego

El Real Valladolid va cerrando su primera semana de entrenamientos y sigue avanzando con Paco Herrera al frente. Poco a poco el equipo trabaja y mejora sus prestaciones. En esta ocasión lo ha hecho con una doble sesión, la penúltima de la semana, en la que el cuerpo técnico ya ha ido incluyendo trabajo táctico específico para la línea defensiva, a pesar de que el técnico dijera en rueda de prensa que no lo iba a hacer hasta la próxima semana. Tras una sesión matinal con mucha carga física, el entrenamiento vespertino ha tenido mucha presencia del balón y esa novedad de ver una de las primeras disposiciones tácticas en esta pretemporada.

 

24 jugadores

Con Alberto Guitián como único ausente, Paco Herrera recuperó a los cuatro futbolistas del Real Valladolid Promesas que, por la mañana, realizaron las pruebas de esfuerzo. Si la matutina fue la primera sesión de Rafa López, en la tarde éste y sus compañeros defensas eran los protagonistas. Divisiones de Paco Herrera que dejaban a Javi Moyano, Samuel Llorca, Mario Gómez y Ángel García, por un lado, y a Markel Etxeberrria, Alex Pérez, Rafa López y Óscar Arroyo, por otro. Dentro del trabajo de movimientos, basculaciones y apoyos, Luismi Sánchez y Fernando Calero intervenían como el apoyo de la salida de balón.
En una sesión en la que el entrenador estuvo muy activo dando indicaciones a todos los jugadores e intentado que mostraran su estilo, el equipo sigue creciendo y formándose para atacar los primeros encuentros amistosos. Con frases como "tenéis que jugar donde vosotros queráis, no donde ellos quieran", "eres defensa, pégate a él. Parecemos madres" o "esto requiere de mucha fuerza, de mucha intensidad, de mucho coraje y hay que hacerlo" el técnico catalán sigue puliendo una semana que el sábado, con otra ración doble, terminará antes de comenzar aquélla que dejará los dos primeros amistosos de la pretemporada.
Para concluir el segundo entrenamiento del viernes, en el que Rafa se retiró antes que sus compañeros tras realizar una sesión doble en su primer día, el equipo disputó un partido a espacio reducido de 11 jugadores contra 12. Al finalizar, el míster se acercó nuevamente al grupo y les felicitó: "Equipo, buen trabajo" fueron las palabras del entrenador con las que se cerró la sesión.