Con todo lujo de detalles

Desde su llegada, Luis César Sampedro dejó claro que quería que su Real Valladolid se debía formar y crear desde los partidos. 11 rivales en la pretemporada 2017, sólo dos de ellos de LaLiga 1|2|3, para diez encuentros. La base de su Pucela iba a estar en la competición. Por ahora, el éxito es rotundo. Seis partidos y ni una sola derrota. Cuatro victorias y dos empates, con 15 goles a favor y sólo cinco en contra. El equipo se encuentra bien y, sobre todo, genera grandes sensaciones. Este Real Valladolid crece e ilusiona a partes iguales con un estilo que este jueves cumplía 20 sesiones de entrenamiento y trabajo. 

 
Si tras la victoria (1-0) ante el Club Deportivo Leganés los de Luis César Sampedro firmaron una suave sesión con la ausencia destacada de Sullayman Marreh, los pucelanos han trabajado todos los condicionantes posibles del juego en estas 20 sesiones de pretemporada. Con una estructuración muy bien definida en el cuerpo técnico, desde el primer día se pudo ver qué estilo iba a tener el Real Valladolid 2017/2018. Delegando muchas funciones en Fran Albert, el balón siempre ha sido el gran protagonista. Desde el primer día. El estilo ha estado claro. Cada jugador, en su posición, y cada trabajo, específico. Sin grandes sesiones físicas, el Real Valladolid se está haciendo a su estilo de juego desde el entrenamiento detallado.
Señalando onces desde bien pronto y trabajando las opciones y alternativas que estos ofrecían desde el primer momento, Sampedro no deja lugar a la improvisación. Inyectando grandes dosis de estrategia al equipo, este Real Valladolid quiere tener controladas todas las opciones que pueda desarrollar en el partido. Un equipo directo y profundo, que debe tener claro qué hacer con el balón a la hora de construir y que no renuncie a los espacios ni los contragolpes es el sustento de un equipo que ha llegado a las 20 sesiones. Dos decenas de entrenamientos marcados por los seis partidos amistosos. Una elevada carga de trabajo que no esconde que este Real Valladolid lo trabaja todo. Con todo lujo de detalles.