Sergio González y la salvación: "Nada está hecho"
Con menos de 72 horas de distancia entre el empate (0-0) ante el Levante UD y la visita del Deportivo Alavés, el Real Valladolid afronta ya ese segundo encuentro consecutivo en el Nuevo Estadio José Zorrilla consciente de la importancia de los tres puntos, tal y cómo ha narrado Sergio González.
El entrenador blanquivioleta, férreo en su idea, ha confirmado en la previa al encuentro ante los vitorianos que "tenemos que intentar mantener nuestra línea de trabajo y competitividad". Seguro en su idea de que el Pucela debe ser el que imponga sus objetivos, el catalán se muestra pendiente del estado mental del equipo.
La gestión del cansancio
"Me preocupa la ansiedad como un elemento más sobre el que trabajar", ha recordado un preparador que cree que es capital "gestionar el cansancio y saber la repercusión del tremendo esfuerzo del otro día". Reconociendo que "estamos priorizando el jugador que esté bien y más fresco" porque "las diferencias entre nuestros jugadores es mínima"
Sergio, seguro: "Jugar en casa o fuera es secundario porque lo importante es adaptarte al partido"
Sabiendo todo lo que tiene, "la opción del segundo punta está ahí". Sin confirmar qué planteará ante el Alavés, Sergio ha confirmado que no hay nada hecho y que el Real Valladolid deberá pelear por conseguir el objetivo. "Nunca está nada hecho. Nuestro camino es el más importante y tenemos que llegar a los 40-41 que te van a dar tranquilidad", ha confirmado, antes de asegurar las mínimas diferencias que existen, en este momento, jugar como local o visitante.
"Jugar en casa o fuera es secundario" porque "lo importante es adaptarte al partido", ha narrado un Sergio que vive el partido "como si fuera un campo neutral, aunque conozcas las dimensiones" y, en esta ocasión, pese al mal momento del rival, no será diferente.
