El Pucela gana fuera lo que pierde en casa
Triunfo en Girona y tres de tres a domicilio (70-73). El Universidad Europea Miguel de Cervantes Real Valladolid Baloncesto, en un partido loco y de altibajos en el que llegó a disponer de una ventaja de 13 puntos y también se vio con esa misma renta de desventaja, salió victorioso para mantener su inmaculada racha lejos del Polideportivo Pisuerga. Los locales tuvieron bola para ganar el partido, pero el Pucela defendió y terminó sentenciando con sangre fría y maestría.
Concentración de inicio
En el Pavelló Girona–Fontajau, Roberto González quería que el Real Valladolid Baloncesto se reencontrase consigo mismo, algo que quedaba patente desde que se lanzaba el balón al aire. Con Jaan Puidet partiendo como titular para defender a Josep Franch, el faro gerundense, el UEMC no tardaba en hacerse con la manija del partido. Del 4-0 inicial se pasaba a un 4-7 en un visto y no visto. Y, desde entonces, no perdía la iniciativa el cuadro vallisoletano. El combo estonio, gigante en defensa y asumiendo galones en ataque, comandaba al equipo en los primeros minutos (11-18).
El brío pucelano obligaba a Carles Marco a pedir tiempo muerto, pero los foráneos volvían por donde lo dejaban. Un ‘dos más uno’ de Justin Raffington abría brecha (11-21) y permitía a los castellanos anotarse el primer periodo, el cual terminaba con un intercambio de triples entre Melwin Pantzar y Albert Sàbat (18-28).
El Real Valladolid, solidario en defensa y desplegando un buen baloncesto ofensivo, contaba con una buena renta y la anotación de ocho jugadores distintos, algo que ratificaba la gran puesta en escena blanquivioleta.
Se ajusta el marcador
El guion cambiaba drásticamente en el segundo asalto. El partido se iba al barro entre faltas, técnicas y protestas, y el cuadro visitante se atascaba por completo. Tres puntos anotados en cinco minutos permitían al conjunto catalán dilapidar buena parte de la ventaja del cuadro pucelano (26-31), en bonus desde que restaban más de cinco minutos del periodo.
Kavion Pippen apagaba el fuego con cuatro puntos consecutivos y entonces era Carles Marco quien paraba el partido para reajustar sus piezas. Los blanquivioleta, que habían sido superiores durante la primera mitad, sufrían para mantener el ritmo anotador y alcanzaban el descanso con un 31-36 a favor, que se antojaba insuficiente después de haber tenido una ventaja de 13 tantos.
Victoria en la montaña rusa
Al descanso, de ese modo, el Universidad Europea Miguel de Cervantes mandaba en la pintura (13-20 en rebotes) y eso se traducía en el resultado del partido, pero los de Carles Marco, de menos más, se habían agarrado al partido con todo. El cinco de 12 en triples de los locales mantenía la igualdad de un encuentro que le iba a exigir al Pucela otros 20 minutos de nivel si quería llevarse la victoria del feudo gerundense.
Sàbat, con 11 puntos, y Pippen, con 10, se erigían como los máximos anotadores de un duelo que iba a cambiar radicalmente tras el paso por vestuarios. El Bàsquet Girona regresaba al parqué como un vendaval y en dos minutos asestaba al Universidad Europea Miguel de Cervantes Real Valladolid Baloncesto un parcial de 12-2 que acababa, de un plumazo, con la sensación de solidez demostrada en los dos primeros cuartos. Ni siquiera el tiempo muerto de Roberto González reanimaba, al menos de manera inmediata, a los blanquivioleta. Albert Sàbat, en ‘modo Most Valuable Player’, se fue hasta los 21 puntos con un ‘tres más uno’ que colocaba a los catalanes con una preocupante renta de nueve puntos (47-38). Y la máxima gerundense llegó a ser de 13 (56-43), pero los castellanos, noqueados por momentos, despertaban.
Toca remar
Sergio de la Fuente se echaba el equipo a las espaldas y comandaba la reacción después de los momentos más críticos del encuentro. El Pucela se afanaba atrás y podía correr al contraataque para colocarse con un esperanzador 57-50 que, tras un estirón final, se quedaba en un 58-55 antes de encarar los últimos 10 minutos.
La cuarta falta personal del capitán blanquivioleta suponía un hándicap para el UEMC Real Valladolid Baloncesto en la primera posesión del cuarto periodo, pero los vallisoletanos respondían apretando en defensa. Un triple de Jordy Kuiper y una canasta de Raffington servían para empatar la contienda, empate que precedía al continuo intercambio entre gerundenses y vallisoletanos. Eran los pupilos de Carles Marco quienes encaraban los últimos tres minutos con ventaja (68-64), pero Alec Wintering, incómodo y prácticamente inédito hasta el momento, decidía el partido. Un triple del norteamericano y una canasta de Kuiper daban la vuelta al marcador (68-69), pero Sàbat daba la réplica (70-69).
Tras un tiempo muerto, Pippen no lograba anotar y el local Olaf Schaftenaar sí lo hacía desde la larga distancia, pero la canasta era invalidada. Y, nuevamente, el base estadounidense se sacaba un truco de la chistera para forzar tres tiros libres cuando la posesión estaba a punto de acabarse. 70-72 y un último intento para su homólogo, Sàbat, quien, a pesar de sus 29 puntos y siete de 15 en lanzamientos de tres, erraba el decisivo que decantó el partido. Jordy Kuiper ponía el último punto con un tiro libre a falta de dos décimas y sellaba la victoria blanquivioleta.
Ficha técnica
70 - Bàsquet Girona: Josep Franch (1), Kaspars Vecvagars (9), Jaume Sorolla (1), Eric Vila (11) y Robert Cosialls (8).
También jugaron: Albert Sàbat (29), Mads Stürup (0), Pol Molins (-), Olaf Schaftenaar (3), Kevin Torres (-), Gerard Sevillano (0) y Gonçalo Pereira (8).
73 - UEMC Real Valladolid Baloncesto: Alec Wintering (9), Jaan Puidet (9), Sylvester Berg Pedersen (0), Sergio de la Fuente (10) y Kavion Pippen (12).
También jugaron: Fernando Revilla (-), Juan García-Abril (2), Davis Geks (2), Melwin Pantzar (14), Justin Raffington (7) y Jordy Kuiper (8).
Parciales: 18-28, 13-8 (31-36 al descanso), 27-19 (58-55) y 12-18 (70-73 al final).
Árbitros: Jorge Muñoz García, María Ángeles García Crespo y Joan Fanés Marginet. Sin eliminados.
Incidencias: Partido correspondiente a la sexta jornada la Liga LEB Oro 2021/2022, disputado en el Pavelló Girona-Fontajau.