Berizzo: "Si el jefe no me agrada, no será mi jefe"

Eduardo Berizzo ha comparecido en sala de prensa este jueves tras el poco habitual entrenamiento en A Madroa con muchos menos efectivos de lo normal. El principal tema a tratar del técnico argentino ha sido la posible venta del Celta a un grupo empresarial chino, de la que se viene hablando en las últimas semanas. El entrenador se muestra optimista respecto a lo que pueda ocurrir en el futuro y lo único que le preocupa es un posible cambio de actitud de la afición.

 
Berizzo reconocía que no le preocupa un cambio de 'jefe', le preocuparía más que fueran sus jugadores los que mutaran. Añadía que, "lógicamente, si el jefe no me agrada, no será mi jefe". Sin embargo, lo que sí inquieta al argentino es que "la gente no esté contenta, que esté preocupada", pero insistía en que "debemos ser pacientes y tolerantes y no anticipar prejuicios que tengan que ver con un cambio en la atmósfera".
Está convencido de que "el club marcha bien y transmitimos sensaciones positivas", aunque su único desasosiego es que la afición piense que "podemos ser peores, pero eso no creo que suceda". Señalaba el técnico celeste que "debemos ser tolerantes y optimistas de cara de a lo que viene que no tiene por qué ser malo".
Sin embargo, Berizzo se mostraba "tranquilo, porque no es mi tema. No me quiero distraer ni me distrae". Es consciente de que lo mejor que puede hacer es "enfocarme en mi trabajo y abstraer a mi equipo de los elogios y la crítica, siempre y cuando esta no sea constructiva", ya que recordaba que "el elogio de un partido como el del Barcelona puede descentrarte".
El argentino recordaba que no forma parte "de ninguna decisión que tenga que ver con el tema de la venta" y que lo que de verdad quiere es "imaginar a mi equipo cada vez mejor", concluía.