La Real rompe el 2017 perfecto
Por favor, indica por qué quieres reportar este vídeo:
La visita del Celta a Anoeta ha afeado uno de los mejores arranques de año de toda la historia del club celeste. Antes de medirse a la Real Sociedad, el conjunto celeste había demostrado estar en un gran momento de forma y había logrado resolver todos sus partidos de 2017 con una victoria. Un expediente intachable: cinco partidos, cinco victorias. Unos resultados que le han permitido entrar de pleno en la lucha por los puestos europeos y seguir vivo en la competición del K.O.
El año comenzó por todo lo alto con una goleada en Mestalla frente al Valencia (1-4) que dejó sentenciada la eliminatoria de octavos de Copa del Rey. Tras esto llegó el primer encuentro de Liga del 2017, en la que el Celta resolvió sin muchos problemas su encuentro contra el Málaga en Balaídos (3-1). El siguiente choque fue la vuelta de Copa frente al Valencia, donde los de Berizzo consiguieron ganar en los minutos finales con un tanto de Pione Sisto (2-1). A todo esto le seguiría el triunfo frente al Alavés en Liga en Balaídos (1-0) y, por último, la victoria ante el Real Madrid en el Santiago Bernabéu que le ha permitido al Celta tomar la delantera en la carrera hacia las semifinales de Copa (1-2). En total, cinco victorias y un balance de 12 goles a favor y 5 en contra.
De hecho, el Celta llevaba más de un mes sin conocer la derrota. La última fue también en tierras vascas, en esta ocasión frente al Athletic de Bilbao en el encuentro de Liga del 19 de diciembre de 2016, en el que los leones remontaron en los últimos diez minutos un gol de Iago Aspas. Tras esto, llegaron la victoria en el encuentro de vuelta frente al UCAM Murcia y los cinco triunfos de 2017.
A pesar de poner fin a una racha de resultados impecable, la derrota contra la Real Sociedad afecta menos de lo que cabría esperar dadas las circunstancias. El conjunto celeste afrontó el partido de Anoeta con casi todas las miras puestas en el encuentro de vuelta de cuartos de final de Copa del Rey contra el Real Madrid y Berizzo reservó jugadores e incluso descartó a cuatro titulares habituales.