El nivel de la delantera celeste, el estímulo de Boyé en el día a día
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La pelota, el peor enemigo del Celta
Lucas Boyé es un luchador incansable, sólo así, se puede entender su visto bueno al reto mayúsculo de ganarse minutos en un Celta que contaba con Aspas, Maxi Gómez, Pione Sisto y Emre Mor. Con pocas oportunidades en el Torino se la jugó en enero y firmó por un equipo en el "iba a trabajar para poder ganarme un lugar".
Boyé mostró su satisfacción por su primera titularidad que según sus palabras llegó gracias a su incansable trabajo: "Gracias a dios, con trabajo llegó el momento, lo pude hacer y me sentí bastante bien". El argentino reveló que no le importa jugar de extremo izquierdo, "en Italia jugué siempre por banda, me siento bien".
Unzué confesó que Lucas Boyé se ganó la oportunidad de ser titular por su trabajo en los últimos días, pero el atacante aseguró en sala de prensa que "desde que llegué entrené al cien por cien". Además, con la ausencia de Maxi Gómez por sanción, espera poder repetir ante el Sevilla algo que deja en manos de Unzué: "El técnico decidirá si me pone. Yo siempre me entreno para jugar y si es entre los once muchísimo mejor", confesó.
Contento en la banda
A pesar de las voces que aseguran que Boyé es peor jugador cuando juega en el costado él mismo recuerda que en "el último año y medio siempre jugué por banda, no tengo problema" aunque reconoce que "he jugado mucho tiempo de delantero centro" por lo que está cómodo en ambas posiciones.
La competencia
Para Boyé la competencia existente en la delantera del Celta es una motivación: "Soy un chico que le gusta la competencia, trabajar, sentirse importante en el sentido de seguir trabajando, que te reconozcan que en los entrenamientos das lo mejor", explicó.
Cuando el Celta se interesó en él ya sabía del nivel de los atacantes "no tenías que informarte mucho. Era ver solo la tabla de goleadores y ver que los delanteros del Celta eran de los mejores de la Liga" lo que consideró un nuevo reto para un jugador joven como él.
Por último reconoció que en su cesión no hay una compra obligatoria por número de partidos: "Por lo que tengo entendido no tiene número de partidos", por ello Boyé confesó que "sólo queda esperar y ver qué pasará".