El mejor año de la historia del filial toca a su fin
El Celta B se marchó al parón navideño en la 14ª posición del Grupo I de Segunda B con 22 puntos. Una posición algo baja teniendo en cuenta el enorme rendimiento que ha mostrado el filial celeste en este 2018, el que se ha convertido en el mejor año de la historia del equipo, tras quedar a las puertas del ascenso a LaLiga 1|2|3 después de caer en la segunda eliminatoria del play off ante el Cartagena.
Con un juego descarado, vistoso e impropio de la categoría de bronce, el Celta B consiguió alcanzar el play off de ascenso a Segunda división esta pasada temporada, después de terminar en cuarto lugar con 63 puntos. Hasta ese momento, la temporada ya era para el recuerdo, pero quedaban más alegrías por llegar.
En la primera eliminatoria, los de Rubén Albés se medían a un difícil Marbella, al que pudo doblegar en una eliminatoria de infarto y en la tanda de penalti en tierras costasoleñas. El equipo estaba un pasito más cerca del ascenso, hasta que llegó el Cartagena para acabar con el sueño celeste, pero no para empañar una temporada 2017/18 que que pasará a la historia como la mejor desde la existencia del filial.
Una camada con mucho futuro
El éxito del Celta B reside en en su fútbol, su filosofía y en la calidad que atesoran muchos de los jugadores de un equipo con mucho futuro, del que han salido y continúan saliendo una gran camada de jugadores. Sin ir más lejos, Brais Méndez se convirtió hace poco tiempo en jugador de pleno derecho del primer equipo, convirtiéndose en una pieza clave y debutando con la selección española.
El excelente rendimiento de perlas como Diego Alende, Juan Hernández, Drazic o Sotres le ha valido a este equipo para mirar cara a cara la historia y servir de ejemplo para el prometedor futuro con el que cuenta la cantera del Celta.
