Coudet y la metamorfosis del Celta: una Navidad de sonrisas celestes
Los jugadores del Celta de Vigo disfrutan de estos días de descanso aliviados tras el resurgir del equipo en las últimas jornadas. El equipo que ahora dirige Eduardo Coudet ha pasado de estar inmerso en los puestos de descenso a situarse cerca de la zona europea Una metamorfosis que ha permitido que esta Navidad el celtismo viva la antítesis a lo sufrido el pasado año.
El pasado 20 de diciembre de 2019, el Celta se marchaba a las vacaciones de Navidad en los puestos de descenso. Una delicada situación que se prolongó hasta el final de temporada, consumando la salvación en la última jornada.
En esta ocasión, la película es bien distinta. En cuestión de seis partidos Eduardo Coudet le ha cambiado la cara a este Celta, que ha conseguido sumar cuatro victorias y un empate en las cinco últimas jornadas, además del triunfo copero. En estos momentos el equipo es octavo con 20 puntos, a tres de la sexta plaza y ejecutando un fútbol alegre y vistoso.
La Navidad de este 2020 es bien distinta a la del pasado año, restando aún una jornada antes del cierre del año. El equipo vigués ha recuperado el buen juego, los goles y lo más importante: la confianza. Coudet ha sabido transmitir en poco tiempo lo que pretendía y eso ha permitido a la plantilla y la afición disfrutar de una Navidad mucho más placentera con su equipo que el año pasado.
Un importante logro que todos esperan que siga manteniendo durante lo que resta de temporada. Una ilusión, esa que ahora se palpa en el entorno celeste, de la que adolecía la afición desde hace mucho tiempo.
