El camino hacia el gol

Muchas veces ser delantero del Real Zaragoza no es una tarea fácil. Saber que estás en un puesto de alto riesgo. Si estás mucho tiempo sin acertar entre los tres palos el 'run run' de la grada puede empezar a perseguirte. Hay quienes lo toman con filosofía y hay a quienes la presión les devora. "¿Suerte de cara al gol? Casi nada o nada...", bromeaba Ángel entre risa esta mañana. Es consciente de que lleva cinco encuentros sin marcar, pero no es algo que le quite el sueño por ahora.

"Un delantero, por lo menos aquí en Zaragoza, tiene más objetivos aparte del gol". Es otra buena verdad que ha explicado Ángel esta mañana. Su sequía le está haciendo recorrer un amplio camino hacia la portería, hasta el día que consiga traspasarla de nuevo. Pero sus partidos no están siendo vacíos, ni mucho. La Romareda, de hecho, premio sus ganas y sus intentos con aplausos en el último partido ante el Mallorca. 
El canario lo sabe y agradece el gesto al respetable. Eso le anima, ha confesado, a intentarlo con más ganas si cabe. También abandona la ansiedad: "Hay veces que tengo más posibilidades de marcar, tengo oportunidades de gol. Contra Elche y Mallorca las tuve aunque no estuve acertado. Otros días me voy sin poder tirar a puerta, por eso lo importante es que un delantero tenga su ocasión por partido y esa posibilidad de marcar. Si fallo, eso ya es solo culpa mía…".
Sus cifras, a estas alturas, son las de un total de nueve goles conseguidos. Uno de ellos, contra el Tenerife, de penalti. El resto, en jugadas de combinación o fabricadas por él mismo. Acumula un total de 30 partidos -entre Liga y Copa- disputados con la camiseta blanquilla. De esos, en 26 ha saltado al campo como titular. 

El perfil similar del pasado

Así, ante el Valladolid se vislumbra un buen escenario para que Ángel se reencuentre con el gol, aunque el propio ariete cree que "no es tiempo de pensar en uno mismo o de irse a casa triste por no haber marcado, lo importante es ganar y si ascendemos será lo mejor para todos". 
Pero, casualidad o no, dentro de las filas del Valladolid hay un viejo conocido de la afición del Real Zaragoza. También conocido por el propio Ángel, por cierto. Se trata de Roger Martí. Militó, a las órdenes de Paco Herrera y Víctor Muñoz, en la temporada 2013-2014, de nefasto recuerdo para la afición. El equipo quedó en tierra de nadie, muy lejos del objetivo del ascenso y sin una identidad ni un sistema. Para colmo, institucionalmente, el equipo estaba a un paso de desaparecer. 
Aquel joven cedido por el Levante llegó para ser el suplente de uno de los 'flamantes' fichajes: Ángelo Henríquez. La realidad fue que, finalmente, aquel muchacho terminó asumiendo el protagonismo en el ataque y, lo cierto, es que sus números fueron bastante aceptables. Un total de 12 goles en 37 partidos jugados y maneras de un delantero con futuro. Sus sequías goleadoras también fueron a rachas. Pero su aportación al ataque era muy importante. Como en el caso de Ángel. 

Un pasado común

¿Qué tienen en común los arietes de Zaragoza y Valladolid? Su pasado en el Levante: "Lo conozco bien, coincidí con él en el Levante. Es un delantero top de Segunda División que pelea cada balón como si fuera el último, muy aguerrido y que además últimamente está marcado goles. Para el Valladolid es un hombre muy importante al que hay que tener en cuenta".
Roger ha evolucionado estos dos últimos años. Una grave lesión de rodilla entre medio, sí, pero ahora es uno de los referentes del conjunto pucelano. Regresó a Zorrilla este mercado invernal, procedente del Levante. Ha participado en once partidos con los de Miguel Ángel Portugal y ha conseguido ya cinco dianas. Una amenaza para la defensa del Real Zaragoza y un duelo interesante entre viejos conocidos con Ángel.