Otro recital del mago Eguaras
La Romareda se puso en pie en el minuto 81. No era para menos. Iñigo Eguaras recibía un merecido reconocimiento al partido realizado. De nuevo, volvió a ser el faro en la creación de juego del Real Zaragoza. Dio dos asistencias, participando decisivamente en dos de los tres goles blanquillos y terminó por confirmar que el gran momento que vive el equipo es, en buena medida, culpa suya.
Lo cierto es que la nueva posición en el terreno de juego, su nuevo rol, le ha venido de perlas al Real Zaragoza. Su visión de juego volvió a demostrarse ante el Lorca. Eguaras manejó los tiempos en todo momento y siempre supo asociarse con el resto de sus compañeros.
Hasta el momento de su cambio, Eguaras siempre fue vertical y siempre abrió espacios ante una defensa visitante que muchas veces se vio desbordada por la enorme visión de juego que tiene el centrocampista blanquillo. Su momento de juego ahora mismo es dulce y eso está repercutiendo muy positivamente en la buena racha que acumula el Real Zaragoza. Y que dure...