Zaragoza-Tarragona, un viaje en dos direcciones
El Real Zaragoza viajará a Tarragona para enfrentarse el próximo lunes al Nàstic. Un encuentro entre dos equipos en horas bajas que buscan salir cuanto antes de la zona baja de la clasificación. Más allá de la lucha por el mismo objetivo, los duelos entre ambos equipos durante las últimas campañas se han caracterizado por un elevado grado de tensión.
Llama la atención esta rivalidad si se tiene en cuenta que es precisamente la zona de Tarragona una de las más propicias para las vacaciones de muchos aragoneses. Siendo además un desplazamiento cómodo que suele reunir en el Nou Estadi una gran cantidad de aficionados zaragocistas, tanto en el encuentro liguero –pese a las dificultades por disputarse en lunes– como en el habitual partido de pretemporada entre ambos equipos.
Resalta también la relación deportiva entre ambas entidades, que comparten el gusto por los mismos futbolistas. Tanto es así, que el próximo lunes en el conjunto de ambas plantillas habrá hasta seis jugadores que hayan vestido ambas camisetas. Eso sí, la mayor parte de los mismos no podrá disputar el partido.
Tres hay en el Real Zaragoza. El más reciente es Álvaro Vázquez, que la pasada campaña pasó como cedido por el equipo catalán, en el que anotó seis tantos. Antes llegó Perone, que llegó precisamente desde el Nàstic. Una camiseta que también vistió Alberto Benito en sus inicios, en la campaña 2012/13, con el equipo tarraconense en 2ªB. En el lado contrario, otros tres. El más recordado por la afición blanquilla es Abraham Minero, que durante cuatro campañas vistió de blanquillo. Menos tiempo y con menos fortuna tuvo Uche, en una trayectoria marcada por las lesiones. Por último, César Arzo, que disputó apenas media temporada en 2014.
Un pasado del que ya apenas queda nada, tan sólo el recuerdo, algo que no debe interceder en lo que sucederá el próximo lunes, un encuentro en el que varios de ellos causarán baja y los que estén, lo darán todo para sacar a su actual equipo de la zona de peligro.
