La Defensora del Pueblo rechaza la pitada al himno, "un rasgo de odio"
La Defensora del Pueblo, Soledad Becerril, ha rechazado hoy que los gritos o las pitadas al himno nacional por considerar que son "un rasgo de odio, antipatía e irascibilidad".Becerril ha hecho estas declaraciones a los medios de comunicación sobre la pitada al himno durante la Final de la Copa del Rey después de entregar el premio Institución del Defensor del Pueblo a Cáritas Española en su primera edición por su labor en favor de los más necesitados.
"El himno debe ser respetado por todo el mundo", ha subrayado la Defensora del Pueblo, quien ha reconocido que "a unas personas les puede gustar más o no".
Becerril ha estimado que los gritos o las pitadas son "rasgos de odio, de antipatía y de irascibilidad, todo lo que debemos procurar rechazar".
Ha declinado comentar si las autoridades deberían tomar alguna iniciativa disciplinaria o de sanción por la pitada al himno en la final de la Copa del Rey.