Las "guerreras" quieren saciar en Suecia su "hambre de triunfo"
La selección española femenina de balonmano, vigente subcampeona continental, afronta el Europeo de Suecia, en el que debutará este domingo (18:00) ante las anfitrionas, dispuesta, como recalcó la capitana Marta Mangué, a saciar su "hambre de triunfo".Lejos de anclarse en la traumática derrota sufrida ante Francia en los cuartos de final de los Juegos Olímpicos, en un encuentro en el que España llegó al ecuador de la segunda mitad con una ventaja de siete tantos, la dolorosa experiencia vivida en Río ha exacerbado la competitividad de las "guerreras".
"Tenemos la ilusión de poder resarcirnos de ese partido con Francia en los Juegos, un encuentro que debe servirnos como un punto de inflexión para lograr un buen resultado en Suecia", señaló el seleccionador nacional Jorge Dueñas.
Para ello, el técnico español ha insuflado una nueva vitalidad al vestuario con la incorporación de hasta tres debutantes en una gran competición internacional, la extremo Amaia González de Garibay, la pivote Judith Sans y la lateral Mireya González, que han reforzado el espíritu de equipo.
"A ganas no creo que pueda superarnos nadie, porque las que somos nuevas nunca hemos vivido esto y nos morimos de ganas por vivirlo, y las que llevan más tiempo se llevaron tal palo en los Juegos con ese fatídico partido contra Francia, que tienen unas ganas de volver a jugar, de demostrar quienes son, que el resultado puede ser espectacular", explicó González de Garibay.
Novedades que han provocado, como se pudo comprobar en la primera parte del último amistoso ante Polonia, algunos ligeros desajustes en los automatismos de una selección que llevaba años jugando prácticamente de memoria,
Unos desajustes que se ven de sobra compensados por la mayor riqueza táctica de la que han dotado al conjunto español las nuevas incorporaciones, especialmente con la irrupción de la lateral Mireya González, que permitirá a Jorge Dueñas contar por primera vez en los últimos años con una jugadora zurda en la primera línea.
Variantes ofensivas a las que se suma la mayor velocidad de la que dotan al juego español la explosiva Amaia González de Garibay y Judith Sans, una pivote capaz tanto de defender en el centro de la defensa como de convertirse en la punta de lanza del juego de contraataque de la selección.
Nuevos argumentos que España deberá explotar al máximo, junto con su ya tradicional solidez defensiva y efectividad en la portería, para superar una complicada primera fase en la que las "guerreras" además de con las anfitrionas se medirán con dos rivales de la talla de Serbia, subcampeón del mundo en el año 2013, y Eslovenia.
No obstante, todos los miembros de la selección española tienen claro que el partido clave será el que les enfrentará mañana con Suecia, bronce en el último Europeo, y que cuenta entre sus filas con una de las mejores jugadoras del momento, Isabelle Gullden, elegida jugadora más valiosa del último Campeonato de Europa.
"La presión de ser las anfitrionas siempre es un arma de doble filo, aunque Suecia es un equipo experimentado y cuenta con muchos argumentos más allá de Gullden", señaló Dueñas, que no oculta que un triunfo sobre las suecas aseguraría a España pasar a la segunda fase con puntos en su casillero.
Si bien, como recalcó el técnico español, no será suficiente con vencer a las anfitrionas, ya que para garantizar el billete a la siguiente ronda, las "guerreras" deberán vencer "al menos" dos de los tres partidos de la primera fase.
Tarea nada sencilla, ante el potencial de Serbia, una selección en la que como destacó Jorge Dueñas "prevalece el juego de equipo" sobre las individualidades, tras la retirada a nivel internacional de Andrea Lekic, y la ascendente Eslovenia, "un equipo que ya demostró su progresión en la fase de clasificación".
Aunque si complicados se antojan los rivales de la primera fase para el conjunto español, no menos temibles se perfilan los posibles adversarios de la "guerreras" en la siguiente ronda, en la que España se medirá con los tres primeros clasificados de un grupo integrado por Francia, vigente subcampeona olímpica, Holanda, subcampeona mundial, Alemania y Polonia
"Ahora mismo sólo nos centramos en superar la primera fase y con el mayor número posible de puntos. No pensamos en ese partido con Francia", afirmó Dueñas, que pese a sus palabras, como el resto del equipo español, tiene marcado en rojo el posible duelo con las galas, en el que las "guerreras" tratarán de tomarse la revancha de la derrota olímpica.