Jémez esquiva la polémica arbitral y destaca que su equipo no bajó los brazos
El entrenador de la UD Las Palmas, Paco Jémez, ha esquivado la polémica por la última jugada del partido ante el Sevilla (1-2), que fue invalidada y acabó en el gol que pudo suponer el empate, y ha destacado que su equipo no bajó los brazos y compitió hasta el final."De los árbitros no voy a hablar, mantengo mi línea de intentar ayudarlos en todo lo que pueda, tenemos que centrarnos en lo que podemos controlar, no debemos perder energías en cosas que no dependen de nosotros, el resultado es inamovible y no voy a entrar siquiera a valorar la jugada, sea lo que sea", ha dicho ante los periodistas.
El técnico ha reconocido que al descanso, lo mejor "era el resultado", 0-1 para un Sevilla que "si llega a estar más acertado hubiera finiquitado el partido", porque su equipo cometió muchos errores de "colocación" y también en la "presión".
Jémez ha valorado la reacción de su equipo en el tramo final, tras el penalti convertido por el argentino Jonathan Calleri.
"El haber apurado hasta el final y haber tenido ocasiones de empatar dice mucho que este equipo ya no es el que baja los brazos, y que ahora no da los partidos por perdidos. Lo que no nos ha servido para hoy, nos puede valer para otros encuentros. Con esta mentalidad vamos a ganar muchos partidos", ha asegurado.
El entrenador del equipo amarillo cree que deben asumir la derrota "ante uno de los mejores equipos de Europa" como "algo natural", sin buscar "excusas", y "pensar ya" en la próxima visita al CD Leganés.
Con respecto al rendimiento de Jonathan Viera, bajo el foco por su posible traspaso a China, Jémez ha dicho que todo lo sucedido esta semana "no le ha afectado" y ha dado muestras de que es "un profesional" y que nadie puede dudar "de su entrega, cariño al club y compromiso con el equipo".