Escándalo Reina Letizia: “¿Sabes lo que les hace a Leonor y Sofía?” (y alucinarás)
Una vez más la Reina Letizia está en el punto de mira. Esta vez, eso sí, nada tiene que ver ni con sus líos con su familia política o con ningún desencuentro con Felipe VI. No, ahora es ella y solo ella la protagonista.
Y es que no es ningún secreto que Letizia es una mujer que está, siempre, muy ateta a todo lo que la estética y la imagen se refiere. Desde que entendió que buena parte de su trabajo es dar una buena imagen en frente de la opción pública, se esfuerza mucho en ello.
Tanto es así que, con esa afán de perfeccionismo que tiene la Reina, no ha dudado en pasar por el quirófano en más de una ocasión. Al margen de su cara o su cuerpo, también el vestuario es muy importante.
Ortiz no se viste con cualquier cosa y todo debe estar siempre bien conjuntado y perfecto. Y claro, esa obsesión por que todo esté en su lugar y por las apariencias se la ha trasladado también a sus hijas.
El escándalo con Leonor y Sofía
Se sabe que la misma preocupación que tiene por su imagen la tiene también (o incluso más) por la de sus hijas. Controla hasta el más mínimo detalle. Tanto es así que incluso hay uno que no deja a Ortiz precisamente en muy buen lugar. “¿Sabes lo que les hace a Leonor y Sofía?”, preguntan muchos en las redes.
Y es que tal y como desvelaron en el programa de La Sexta Arusitys, a la Reina no le parece bien que Leonor, la heredera, se vea más baja que su hermana Sofía, por lo que, como comentaron en el citado programa, “A veces le ponen zapatos con un poquito de tacón para que parezca más alta”.
El "problema" de altura que 'enfrenta' a la princesa Leonor con su hermana la infanta Sofía #arusitys https://t.co/i6McDXa8wN
— Arusitys (@ArusityslaSexta) 8 de diciembre de 2018
Un lío que no ha pasado desapercibido en las redes, donde le dicen de todo a Ortiz: “Esta mujer está loca” o “Está obsesionada…pobres niñas”. Lo cierto es que de momento este ‘truco’ de Ortiz ha funcionado, aunque si Sofía sigue creciendo más que su hermana, llegará un momento en el que será imposible taparlo.
