Un partido entre el Valladolid y el Valencia, entre los sospechosos de amaño
Un partido de fútbol entre el Valladolid y el Valencia figura entre los sospechosos de haber sido amañados por la trama que hoy ha destapado la Policía Nacional en una operación, aún abierta, en la que han sido detenidos varios jugadores.
Según han indicado a Efe fuentes próximas a la investigación, este encuentro fue uno de los amañados, además de otro partido entre el Huesca y el Nástic de Tarragona y al menos otro más entre equipos que las fuentes no han concretado.
En ese partido de Liga, disputado el pasado 18 de mayo en el estadio vallisoletano José Zorrilla, el equipo local perdió 0-2 y el Valencia obtuvo, con su victoria, plaza para la Liga de Campeones como cuarto clasificado, en detrimento del Getafe.
La Policía Nacional ha iniciado esta mañana una operación en la que se prevén once detenciones, entre ellas la de varios futbolistas.
Tal y como se desprende de las pesquisas, la trama seleccionaba los encuentros, captaba a futbolistas y les pagaba en metálico por adelantado para que se dejaran ganar.
De este modo, podían hacer apuestas combinadas -resultado final y resultado de la primera parte; resultado final y número de córners, por ejemplo- y se aseguraban las ganancias en las apuestas deportivas.
Entre los detenidos, según las fuentes, figuran varios futbolistas, entre ellos el exjugador del Real Madrid Raúl Bravo y Borja Fernández, del Real Valladolid Club de Fútbol y que se retiró recientemente tras jugar las dos últimas temporadas en el equipo pucelano y ser su capitán.
También han sido arrestados Carlos Aranda, exjugador de varios equipos de Primera División; Íñigo López, jugador del Deportivo de La Coruña; Agustín Lasaosa, presidente de la Sociedad Deportiva Huesca, y Juan Carlos Galindo Lanuza, jefe de los servicios médicos del mismo club.
Las fuentes de la investigación han precisado a Efe que se prevén once detenciones y que los agentes de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) han iniciado también varios registros, uno de ellos en la sede de la Sociedad Deportiva Huesca.
Precisamente, el origen de esta operación policial está en una denuncia de LaLiga en mayo de 2018 a raíz de las presuntas irregularidades detectadas en el partido que disputaban el Huesca contra el Nástic de Tarragona y su relación con las apuestas deportivas de este encuentro.