Luis Enrique se refugió en el ciclismo tras la muerte de su hija Xana
Momentos convulsos en la selección española tras acabar la fase de clasificación a la Eurocopa 2020. La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) no ha sabido gestionar especialmente bien la salida de Robert Moreno y el regreso de Luis Enrique, lo que provocó una inusual situación este lunes por la noche tras la victoria de España contra Rumanía en el Wanda Metropolitano.
Más allá de todo el lío y opiniones que se están generando, lo único bueno de toda esta historia es que Luis Enrique Martínez se encuentra preparado para seguir adelante con su vida y su carrera tras la trágica muerte de su hija Xana. Su regreso lo acaban de hacer oficial Luis Rubiales, presidente de la RFEF, y José Francisco Molina, director deportivo, en una rueda de prensa en La Ciudad del Fútbol de Las Rozas.
Luis Enrique, con el ciclismo como vía de escape
"Nuestra hija Xana ha fallecido esta tarde a la edad de 9 años, después de luchar durante cinco intensos meses contra un osteosarcoma", comunicó el técnico asturiano el pasado 29 de agosto. Una triste noticia que sacudió a todo el fútbol nacional e internacional.
Luis Enrique, poco a poco, intentó volver a la normalidad y, ahora, ya se encuentra en condiciones de afrontar el reto que él comenzó: jugar y ganar la Eurocopa 2020 con España. En todos estos meses, el seleccionador encontró en el ciclismo su gran vía de escape.
El asturiano es un deportista nato y montar en bici es una de sus grandes pasiones. Tanto es así que el pasado 3 de noviembre no dudó en participar en la competición ciclista 'Sa Costa Brava'. Esta es una prueba bastante dura, pues consta de 120 kilómetros y 1.000 metros de desnivel positivo que Luis Enrique hizo en cinco horas y 40 minutos.
