Jorge Jesús: del lujoso ostracismo al umbral de una apasionante consagración
Antonio Torres del Cerro ,São Paulo, 20 nov (EFE).- En julio de 2018 Jorge Jesús hacía las maletas para marcharse de Lisboa rumbo a Arabia Saudí después de una convulsa y fracasada estancia en el Sporting.,Nada hacía presagiar que, en menos de un año y medio, pasaría del bien remunerado fútbol saudí a sentarse en el banquillo del popularísimo Flamengo y quedar a punto de ganar la Liga brasileña y disputar con River Plate el título de la Copa Libertadores.,El próximo 23 de noviembre, en Lima, el
Antonio Torres del Cerro
São Paulo, 20 nov .- En julio de 2018 Jorge Jesús hacía las maletas para marcharse de Lisboa rumbo a Arabia Saudí después de una convulsa y fracasada estancia en el Sporting.
Nada hacía presagiar que, en menos de un año y medio, pasaría del bien remunerado fútbol saudí a sentarse en el banquillo del popularísimo Flamengo y quedar a punto de ganar la Liga brasileña y disputar con River Plate el título de la Copa Libertadores.
El próximo 23 de noviembre, en Lima, el técnico luso se tomará su particular revancha para quienes daban por finiquitada su carrera de entrenador.
A sus 65 años, el visceral y melenudo Jorge Jesús podrá hacer historia si vence al actual campeón de la Libertadores.
De ganar, se convertirá en el segundo técnico europeo en levantar una Libertadores, después del croata Mirko Jozic en 1991 con el Colo Colo.
Consumidor de fútbol "casi las 24 horas del día" como él mismo reconoce, y confeso admirador de Johan Cruyff, Jorge Jesús renunció al cheque de 7,75 millones de dólares que recibía cada año en el Al-Hilal para embarcarse en el Flamengo.
"Si fuese por el dinero no habría venido a Brasil. Vine porque sabía que aquí hay pasión", afirmó 'JJ' en un programa televisivo.
Jorge Fernando Pinheiro de Jesús, un tipo frío y exigente en el trato con los jugadores y de trato un poco áspero con la prensa, ha olvidado el vía crucis que pasó en su última etapa en Portugal.
En el Sporting, al que llegó en 2015 en una polémica transferencia después de seis exitosas temporadas en el rival capitalino del Benfica (2009-2015), no logró ningún gran título y tuvo que marcharse por la puerta trasera y en medio de un traumático episodio.
Descontentos con los resultados, un grupo de radicales del Sporting invadieron un entrenamiento y agredieron a jugadores y al propio técnico en mayo de 2018.
El portugués, que en el Benfica había ganado tres campeonatos ligueros y formado a futbolistas como Ángel di María, David Luiz y Nemanja Matic, tuvo que dar un paso atrás y desdecirse de lo que había jurado: que no se iría a una liga menor a ganar más dinero.
La aventura en el Al-Hilal de Arabia le duró menos de un año. Seducido por el ambicioso proyecto del Flamengo, fichó a mediados de este año y rápidamente le cambió la cara al club.
Su electrizante estilo, que combina posesión de balón con una alta presión, ha embaucado a toda la hinchada brasileña.
"El Flamengo sabe en el momento exacto alternar el marcaje por presión y el intercambio de pases con un marcaje más reculado y con los contraataques en velocidad. Es un fútbol moderno, que da gusto ver y eficiente", analizó el campeón mundial Tostão, en una de sus columnas de opinión de Folha de São Paulo.
'JJ', acusado en muchas ocasiones de arrogancia por sus declaraciones altisonantes, ya ha sido blanco de polémicas con sus colegas brasileños.
Renato Gaúcho, entrenador del Gremio, equipo al que el Flamengo vapuleó en la semifinales de la Libertadores, intentó menospreciar al técnico luso al asegurar que no había ganado nada fuera de Portugal.
Y es cierto. El entrenador, que antes del Benfica y el Sporting comandó pequeños y medianos clubes de su país, rozó en dos ocasiones las conquistas continentales en la Liga Europa al servicio del Benfica.
En 2013 cayó ante el Chelsea en el último minuto y en 2014 cedió en los penaltis frente al Sevilla.
Quién sabe si a la tercera será a la vencida.